Luego de tener uno de los peores primeros tiempos en la era de Valjko Paunovic al frente de los universitarios, los rojiblancos le ganaron la partida a los felinos en la primera parte, pues Carioca y Gorriarán no lograron recuperar los balones en la media cancha para surtir a sus volantes por fuera o a los delanteros Nicolás Ibáñez y André-Pierre Gignac.
El Rebaño Sagrado comenzó a ejercer una presión alta en la salida y cada vez recuperó más cerca la pelota en zona de peligro, aumentando el trabajo para la defensiva auriazul, por lo que poco a poco tenían que aparecer las figuras de Joaquim Pereira y Guido Pizarro.
Chivas dio un par de avisos con Alan Mozo y Érick Gutiérrez realizando remates al arco defendido por Fernando Tapia, pero cuando más insistía el equipo de Gago, parecía llegar la oportunidad inmejorable para que Tigres se adelantara en el marcador.
Al 38’ Ozziel Herrera fue derribado en el área por Gutiérrez, por lo que Daniel Quintero señaló la pena máxima y vino Gignac a ejecutar.
Sin embargo, el goleador histórico francés falló al poner la esférica a la izquierda del guardameta Rangel, quien se tendió a ese costado para ahogar el grito de gol.
Para la segunda parte, Chivas continuó siendo mejor que los auriazules en el terreno de juego y apenas al 47’ los visitantes encontraron el gol de la ventaja, luego de una buena jugada individual de Roberto Alvarado para ponerse 0-1.
Chivas daba la sensación de estar más cerca del segundo gol, pero apareció André-Pierre Gignac al 55’ para hacer una genialidad para poner el 1-1, luego de una buena jugada de Angulo por izquierda, quien mandó un pase raso para el francés que de primera prendió de zurda y la pelota entró de campanita.
Paunovic mandó a la cancha a Diego Lainez y a Marcelo Flores por Ibáñez y Herrera al 62’, buscando ir por el triunfo en casa ante un rival que los había superado en la mayor parte del encuentro.
La polémica arbitral surgió al 73’ cuando ‘el Tiba’ Sepúlveda jaló en linderos del área a Gorriarán cuando le robó una pelota en la salida, pero no se marcó la falta cuando el defensa tapatío era el último hombre.
El juego se partió y se tornó de ida y vuelta, pero sin mayor claridad y al final los equipos terminaron por repartir unidades en la cancha de San Nicolás. Tigres llegó a 11 puntos y mantuvo el invicto.