¡Qué espectáculo! El Real Madrid y Manchester City sellaron un empate en un partidazo lleno de emociones, intensidad y golazos.
Los Merengues y Citizens dieron posiblemente el mejor duelo de lo que va de la presente edición de Champions League, en el que igualaron 3-3 para dejar la definición de los Cuartos de Final hasta el encuentro de vuelta.
La intensidad hizo su aparición desde muy temprano en el Santiago Bernabéu y el City aprovechó un cobro de falta para madrugar al Madrid con un gol de Bernardo Silva, quien se avivó y mandó un disparo que tomó desprevenido al arquero Andriy Lunin, al 2’.
El metódico equipo de Pep Guardiola cedió ante el caos de los dirigidos por Carlo Ancelotti y el primer tiempo se convirtió en un ida y vuelta constante, precisamente el futbol que más dominan y más le favorece a los blancos.
En esos caóticos minutos los locales le dieron la vuelta al marcador, en cuestión de dos jugadas con el autogol de Rúben Días, al 12’ , y el tanto de Rodrygo, al 14’, tras un contragolpe a velocidad.
Los ingleses se veían incómodos y no lograron proponer sobre el campo ese futbol que dominan y que les ha dado tantos éxitos.
Fue hasta el segundo tiempo que el Manchester se hizo fuerte, comenzó a controlar el juego en el propio terreno del Madrid y a generar jugadas entre líneas.
A partir de ahí llegó la voltereta con dos golazos, uno de Phil Foden y otro más del croata Josko Gvardiol, ambos con potentes tiros desde fuera del área, al 66’ y 71’.
Pero ya es sabido que al Real Madrid no se le puede dar por muerto en Champions, y con jerarquía característica encontró la salvación, de la mano de otro golazo, esta vez de Federico Valverde, quien prendió el balón de primera intención luego de un centro y lo mandó a guardar a las redes citizens.
Después de 90 minutos de locura, el pase a las Semifinales se decidirá en el encuentro de vuelta en Inglaterra.