El Dream Team no juega de local en París.
Y se lo hacen saber desde las tribunas, cuando presentaron en el sonido local a la quinteta estadounidense le abuchean, buscaban la Final olímpica de nueva cuenta ante Francia y el quinto Oro olímpico consecutivo.
El jugador Joel Embiid era el más abucheado por su doble nacionalidad francesa y estadounidense.
La afición serbia tenía un altavoz incluido en la garganta. Había mayoría afición francesa que se quedaron para ver quién sería su rival por el título olímpico.
LeBron James, Kevin Durant y Curry se encargaron de la remontada.
Festejo con golpe de pecho y brazos mostrando poderío.
Es el Dream Team. De ir abajo 11 puntos en el entretiempo, lograron remontar y empatar a 84, en el último cuarto y a menos de cinco minutos del Final.
Lo demás no fue apto para cardíacos.
El “¡USA, USA, USA!” se entremezclaba con el “¡Serbia, Serbia!”, en la Arena Bercy, cuando en el tercer cuarto los estadounidenses lograron acortar distancia a seis puntos y con tres minutos en el reloj.
Steve Kerr, entrenador de Estados Unidos, con la mirada penetrante, con los brazos cruzados y el dedo índice a la mitad de la boca.
En un juego de gigantones, el serbio Nikola Jokic resaltaba entre los demás. Era una de las celebridades que acaparaba los dorsales de la afición.
Últimos segundos de alarido, el debutante en Juegos Olímpicos, Curry, logró un tiro libre para el 95-91.
Volvió a sonreír, celebración de pecho a pecho con LeBron James. Ya están avisados que ante Francia jugarán contra una quinteta y contra toda la afición.