VENCE AL SEVILLA
* La escuadra de Pep Guardiola gana en penales
* El partido terminó 1-1 y se tuvo que definir en tanda de penales, donde sólo hubo una falla
CIUDAD DE MÉXICO.- Sevilla no pudo cambiar su historia negativa en la Supercopa de Europa, que se le ha negado en las recientes seis ocasiones que lo disputó; cayó ante Manchester City en penales, luego de un 1-1 en tiempo regular. El equipo español perdonó en más de una ocasión a su rival inglés.
Costó trabajo, pero al final el cuadro dirigido por Pep Guardiola se quedó con su primer título, sumando su cuarto campeonato en la temporada, junto a la Premier League, la FA Cup y la UEFA Champions League, que ganó también por primera ocasión el pasado 10 de junio.
Como se pronosticó, el poderoso equipo de la Premier League impuso condiciones en los primeros minutos sobre Sevilla, que en su papel de víctima arrancó el juego con una clara postura defensiva.
Sin embargo, después de la pausa de hidratación, el cuadro español consiguió sacudirse un poco la presión de los ingleses, que si bien habían generado dos disparos de larga distancia peligrosos, sí mantuvieron los primeros minutos una gran presión en el campo rival y en el área de Yassine Bounou, quien ya había salvado en dos ocasiones su marco.
Tres minutos después de esa pausa, Youssef En-Nesyri apareció de manera sorpresiva en el área del City y con un gran cabezazo, potente y colocado en la base del poste derecho de Enderson puso adelante al Sevilla cuando el reloj marcaba el minuto 24.
Con la ventaja mínima el cuadro dirigido por José Luis Mendilibar logró irse al descanso. Y aunque en el inicio de la parte complementaria los ingleses mantuvieron la presión, pero luego de los primeros 10 minutos el Sevilla le dio vuelta al encuentro y tuvo al menos tres jugadas claras de gol para aumentar su ventaja.
Las tres fueron erradas por el autor del gol Youssef En-Nesyri, quien perdió tres mano a man0o ante Ederson, abriendo la puerta a los rivales para que empataran el marcador al minuto 63, gracias a un buen cabezazo de Cole Palmer, cuando más sufría y peor jugaba el Manchester City.
