*El secretario general de la organización, António Guterres, remarcó las preocupaciones de la institución, lamentando que Israel esté violentando constantemente los preceptos incluidos en la Carta de las Naciones Unidas.
TEL AVIV.- En el primer día de la sesión anual de la Asamblea General de Naciones Unidas, la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza estuvo en el centro de las intervenciones de los líderes mundiales que tomaron la palabra en Nueva York.
Presidentes como Gustavo Petro, Recep Tayyip Erdogan, Masoud Pezeshkian, Lula da Silva y Joe Biden, expresaron desde distintas perspectivas sus preocupaciones sobre la crisis humanitaria en el enclave palestino y pidieron un cese al fuego lo más pronto posible.
Los líderes del mundo exigen paz en la Franja de Gaza.
En los días previos, medios de comunicación internacionales ya vaticinaban que el conflicto israelí-palestino iba a abarcar gran parte del grueso de la Asamblea General de este año, debido a la crítica situación humanitaria dentro del enclave, en donde ya han sido asesinadas más de 40.000 personas.
Desde el arranque de la 79a Asamblea General de la ONU, el secretario general de la organización, António Guterres, remarcó las preocupaciones de la institución, lamentando que Israel esté violentando constantemente los preceptos incluidos en la Carta de las Naciones Unidas.
Lo acusó de tener la capacidad de "devastar sociedades enteras o ignorar olímpicamente el bienestar de su propia población".
"¿Cómo puede aceptar el mundo el futuro de un Estado (Israel) que incluye un gran número de palestinos sin ninguna libertad, derechos ni dignidad?", expresó Guterres durante su intervención y enfatizó que "nada puede justificar el castigo colectivo" en contra del pueblo palestino.
Varias intervenciones se sumaron a los pedidos de Guterres.
Muchos de los líderes del planeta expresaron sus ideas en relación con la crisis en Gaza y la posible expansión del conflicto armado en Líbano, después de que Israel haya comandado duros ataques en contra de numerosas locaciones en territorio libanés.
Al unísono advirtieron de las posibles consecuencias de una guerra directa entre Israel y Hezbolá.
Gaza, en el centro de los primeros discursos
Como es costumbre en las Asambleas Generales de la ONU desde hace casi 80 años, el presidente brasileño inició la ronda de intervenciones de jefes de Estado y de Gobierno.
Esta vez, Luiz Inácio Lula da Silva arrancó su discurso saludando a la delegación del Estado de Palestina, que participa por primera vez en el encuentro.
Luego, expresó su rechazo ante "una de las mayores crisis humanitarias de la historia".
En Gaza y Cisjordania asistimos a una de las mayores crisis humanitarias de la historia reciente, que ahora se extiende peligrosamente al Líbano.
Lo que comenzó como una acción terrorista de fanáticos contra civiles israelíes inocentes se ha convertido en el castigo colectivo de todo el pueblo palestino, sentenció el mandatario brasileño.
Además, criticó que "el derecho a la defensa" de Israel se hubiera convertido en lo que catalogó como en "el derecho de venganza".
Por su parte, el último discurso del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, frente a la ONU también tuvo al conflicto armado entre Hamás e Israel como protagonista.
El mandatario abordó la crisis en Gaza como una consecuencia de los ataques de Hamás el pasado 7 de octubre contra Israel, en el que murieron unas 1.200 personas.
Sin embargo, añadió que los civiles dentro del enclave palestino "son inocentes".
Biden también instó a las partes a sellar un acuerdo de cese al fuego y liberación de los rehenes israelíes secuestrados en Gaza.
Ahora es el momento para que las partes finalicen los términos, devuelvan a los rehenes y aseguren la seguridad de Israel y Gaza, alivien el sufrimiento en Gaza y que se pongan fin a esta guerra, mencionó Biden.
También advirtió sobre un posible derrame de la violencia en rumbo al Líbano, aunque avisó que el mundo aún está a tiempo de evitarlo.
Turquía e Irán denuncian actos "genocidas" de Israel
Dos de los discursos más intensos y críticos en contra del Estado israelí fueron el del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y su homólogo iraní, Masoud Pezeshkian.
Erdogan fue sumamente incisivo en afirmar que los "valores de Occidente" están muriendo dentro de Gaza.
Y preguntó al pleno: "¿Los niños palestinos no tienen derechos?"
Al igual que Hitler fue detenido por la alianza de la humanidad hace 70 años, (Benjamin) Netanyahu y su red asesina deben ser detenidos por la 'alianza de la humanidad', sentenció el presidente turco.
El mandatario turco describió la ofensiva de Israel en Gaza como la "agresión más bárbara, atroz y extensa" en la historia reciente de la humanidad.
Por su parte, el mandatario iraní, elegido tras la muerte de su predecesor, Ebrahim Raisi, en un helicóptero, también fue contundente en sus acusaciones en contra de Israel.
Los dirigentes (israelíes) califican este genocidio (...) como autodefensa legítima.
Consideran a hospitales, guarderías y escuelas como blancos militares legítimos, sentenció.
Además, hizo un llamado a la comunidad internacional para alcanzar "un alto el fuego permanente en Gaza y ponga fin a la barbarie desesperada de Israel en Líbano, antes de que engulla a la región y el mundo".
Asimismo, defendió a su país y los cuestionamientos de haber atacado a Israel.
"Irán jamás inició una guerra, solo se ha defendido heroicamente contra la agresión externa", sentenció.
Voces críticas contra la guerra en Gaza desde América Latina
Por otro lado, el líder colombiano, Gustavo Petro, reclamó a las naciones más desarrolladas del mundo por "no escuchar" las exigencias de la mayor parte del planeta, que sigue pidiendo el fin de la guerra en Gaza mediante resoluciones de Naciones Unidas, vetadas en su mayoría por Estados Unidos.
Petro exigió el fin de las hostilidades para que el mundo pueda aspirar a un futuro sobre "la defensa de la vida".
Hoy tenemos 20.000 niños y niñas asesinados bajo las bombas, y los presidentes de los países de la destrucción humana se ríen en estos pasillos, expresó el primer mandatario de izquierda de Colombia.
Por su parte, Gabriel Boric, presidente de Chile, fue más moderado y también condenó los ataques de Hamás del 7 de octubre.
“Se condena lo que hace el adversario, pero cuando es un supuesto amigo o alguien del mismo color político el que vulnera la carta de la ONU se mira hacia otro lado”, sentenció Boric.
Y agregó: “Desde Chile nos revelamos al doble estándar de los DD. HH.”
“Los derechos humanos se deben respetar siempre y en todo lugar.
Debemos exigir este respeto sin importar el color político, sin importar el dictador o el presidente de turno que los vulnera”, sentenció.
Me niego a elegir entre el terrorismo de Hamás o la masacre y conducta genocida del Israel de Netanyahu, concluyó el mandatario chileno.
Se espera que en los próximos días la guerra en Gaza y el pedido de contener la escalada en Líbano sigan en el centro de las alocuciones de los mandatarios de todo el mundo.