* Tenemos que detener esta invasión de una vez por todas, afirmó el republicano


MIAMI, Florida (Agencias).- El Gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció este miércoles el envío de más elementos de la Guardia Nacional y Estatal a la frontera de Texas con México, con el fin de “ayudar” a la entidad en “sus esfuerzos por detener la invasión por la frontera sur”.


El republicano, que se retiró el pasado 21 de enero de las elecciones primarias, sumará mil soldados a los más de 90 agentes de la Patrulla de Carreteras de Florida (FHP), la Comisión para la Conservación de la Fauna y la Pesca (FWC), y el Departamento de Aplicación de la Ley (FDLE), que permanecen en la frontera entre ambas naciones.

En ese sentido, el Gobernador De Santis sostuvo que el fortalecimiento de la seguridad en Texas, ayudará a “agregar barreras adicionales, incluido alambre de púas a lo largo de la frontera”.

“No tenemos un país si no tenemos una frontera”, expuso.

Ante este contexto, el Partido Demócrata de Florida consideró la operación del mandatario estatal como un “truco político”.

GOBERNADOR DE TEXAS ALEGA DERECHO A AUTODEFENSA

El Gobernador de Texas, Greg Abbott, alegó el miércoles pasado el “derecho constitucional” del estado a “defenderse y protegerse” en la disputa abierta con la Administración de Joe Biden por las medidas para prevenir el cruce de migrantes impuestas en la frontera con México, que están siendo revocadas por el Poder Judicial.

“El Gobierno federal ha roto el pacto entre Estados Unidos y los estados. El Poder Ejecutivo tiene el deber constitucional de hacer cumplir las leyes federales que protegen a los estados, incluidas las leyes de migración vigentes en este momento. Biden se ha negado a hacer cumplir esas leyes e incluso las ha violado”, manifestó.
Abbott, a través de un comunicado, criticó que el mandatario ha “enviado a sus abogados a lo tribunales para demandar a Texas por tomar medidas para asegurar la frontera”, en vez de “procesar a los migrantes por el delito federal de entrada ilegal”, y que ha “dado instrucciones a sus agencias para que ignoren los estatutos” que exigen la detención de migrantes que crucen la frontera.

El Tribunal Supremo estadounidense aprobó el pasado 22 de enero autorizar la retirada de la alambrada de púas instalada por Texas en la frontera con México, dando así la razón a las autoridades federales.

Esta decisión ha supuesto una victoria política para Biden, que apelaba a la cláusula suprema de la Constitución, que consagra que las leyes federales están por encima de las estatales.