WASHINGTON.- Un hombre del estado de Washington que usó un megáfono para orquestar el ataque contra guardias que protegían el Capitolio estadounidense fue sentenciado el miércoles a más de siete años de cárcel.
El juez Royce Lamberth dijo que videos captaron a Taylor James Johnatakis cuando asumía un rol de liderazgo en el motín del 6 de enero de 2021.
Johnatakis lideró a otros alzados a arremeter contra una línea policial, “gritó órdenes” por el megáfono y giró instrucciones paso por paso para someter a los guardias, señaló el juez.
“En cualquier turba enardecida, hay líderes y hay seguidores. El señor Johnatakis era líder. Él sabía lo que hacía ese día”, dijo el juez antes de sentenciarlo a siete años y tres meses de cárcel.
Johnatakis, quien se representó a sí mismo con un abogado como asesor, ha expresado repetidamente retórica al parecer inspirada en el movimiento antigubernamental “ciudadano soberano”.
Le hizo preguntas al juez durante la declaración de sentencia, como “¿Se registró que me arrepiento de mis pecados?”.
Lamberth, quien calificó de “balbuceos incoherentes” algunas de las palabras de Johnatakis, declaró:
“No voy a estar respondiendo preguntas aquí”.
La fiscalía había recomendado nueve años de cárcel para Johnatakis, un instalador de sistemas sépticos autoempleado.
“Johnatakis no era simplemente otro amotinado; lideró, organizó y animó el asalto contra los oficiales en el Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero”, escribieron los fiscales en un documento judicial.
El jurado lo halló culpable de cargos de felonías después de un juicio el año pasado en Washington, D.C.
Johnatakis, de 40 años y de Kingston, Washington, tenía el megáfono sujeto a la espalda cuando marchó hacia el Capitolio tras asistir a la concentración que encabezó el entonces presidente Donald Trump cerca de la Casa Blanca el 6 de enero.
“¡Esto se acabó!” le gritó a la turba de alzados ahí.
“Michael Pence ha votado en contra el presidente. Tenemos que usar la opción nuclear”.
Aproximadamente mil 350 personas han sido acusadas de delitos federales relacionados con los disturbios en el Capitolio.
Más de 800 de ellos han sido condenados, y aproximadamente dos tercios han recibido penas de prisión que van desde varios días hasta 22 años.