* La Casa Blanca también estaría dispuesta a aceptar detenciones a gran escala dentro de territorio de EU

Washington DC, Estados Unidos.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está abierto a reiniciar las expulsiones sumarias de migrantes a través de la frontera con México como una forma para lograr que los republicanos en el Capitolio aprueben un paquete de ayuda militar para Ucrania e Israel, reveló la televisora CBS.

Citando a cuatro fuentes familiarizadas, la cadena aseguró que la Administración Biden planteó ya a los legisladores estar dispuesta a revivir la política de expulsiones sumarias que estuvo vigente entre 2020 y 2023 bajo justificación de la emergencia por la pandemia del Covid-19, conocida como Título 42.

Iniciadas en marzo de 2020 bajo el expresidente Donald Trump en marzo de 2020, las expulsiones de migrantes irregulares a México bajo el Título 42 concluyeron en mayo de 2023, sumando un total de 2.8 millones a las que se les negó el derecho de solicitar asilo bajo la normatividad regular estadounidense.

Hoy, medios del Capitolio reportaron que el secretario de Seguridad Interna de EU, Alejandro Mayorkas, sostiene esta tarde una negociación con el senador demócrata Chris Murphy y el senador republicano James Lankford, quienes buscan encontrar un acuerdo en temas fronterizos como las expulsiones.

Previamente, el propio presidente Biden ha dicho estar dispuesto a hacer concesiones a los republicanos en seguridad fronteriza en aras de lograr la aprobación antes de que termine el año 2023 de una solicitud de ayuda militar para Ucrania e Israel que suma casi 106 mil millones de dólares.

Además de las expulsiones bajo algo similar al Título 42, la Casa Blanca también estaría dispuesta, según CBS, a realizar un aumento drástico de las deportaciones expeditas desde el interior del territorio estadounidense de aquellos migrantes irregulares que no aprueben sus primeras entrevistas de asilo.

Según el mismo reporte, la Administración Biden también estaría dispuesta a aceptar detenciones a gran escala dentro de territorio estadounidense de migrantes irregulares que estén esperando la resolución de sus casos de asilo, algo para lo que no es claro que existan, sin embargo, las instalaciones para hacerlo.

Desde la semana pasada, organizaciones pro-migrantes y legisladores latinos han expresado su rechazo a cualquier tipo de programas que amplíen la detención provisional de migrantes, así como cerrar las avenidas para acceder legalmente a presentar una solicitud de asilo en los puertos fronterizos de Estados Unidos.