gilberto haaz
Los pioneros siempre son recordados. Camelot.
HACE 50 AÑOS
Me había hecho a la idea que este septembrino mes, iría al US Open, a ver un juego de Carlitos Alcaraz, pero un vértigo me trae más jodido que las encuestas de Morena a Ebrard y a Adán y a Monreal, porque, dicen, que la suerte está echada, como en el Rubicón.
Para el vértigo, que no es de Meniér, una enfermedad que se mete por el oído y avanza y avanza. La mía es postural, lo agarré por una vacuna de Johnson cuando fui a ponerme la dosis doble.
Me dejó como al rey Tojo: To-jodido. Y ahí ando en este vértigo postural que, el padre Proceso Sebastián, me dio un remedio casero de avena con manzana en ayunas y me envió una bendición, por ahí, y eso tomo.
Va uno a todas, cuando la enfermedad te acecha, otro me dijo albureando que, con agua y ajo, o sea a aguantarse y a joderse, pero estoy en buenas manos con el doctor Rafael Canales, un excelente neurocirujano que me da mis zangoloteadas como técnica de lucha libre, y me libera de ese mareo.
Al acostarme y despertarme, hay que hacer los ejercicios, como giraba la cabeza Linda Blair en el Exorcista.
Pero hablaba del US Open, donde ayer, en una ceremonia tipo como la hacen los gringos, en la cancha central que lleva su nombre, homenajearon y reconocieron a la tenista Billie Jean King (79 años), ganadora de 39 títulos de Grand Slam: 12 en individuales, 16 en dobles femenino y 11 en dobles mixto.
Sucede que, cuenta la historia, una mañana de hace 50 años la tenista, junto a otra compañera, comenzó a hacer una revuelta y se fueron a hablar con los directivos tenistas.
Sucede que las mujeres ganaban cinco veces menos que los hombres y ella, la gran Billie, llegó y le dijo amenazante: o nos pagan igual que a los hombres o no jugamos el torneo del año que viene. Se quedaron como Santiago Creel cuando tuvo que renunciar y tuvieron que apechugar.
Este año el US open pagará 65 millones de dólares solo en premios. Y a los finalistas, hombre y mujeres, al segundo lugar millón y medio y al ganador o ganadora, 3 millones de dólares.
Eso se lo deben a Billie Jean King, por eso ayer le hicieron su homenaje y de invitada de lujo, la esposa del gran Obama, doña Michelle Obama, a quien un día Paul Mc McCartney en la Casa Blanca en un concierto le cantó aquella rola legendaria, llamada Michelle, y a la mujer se le escurrieron las lágrimas.
LA TURISTICA ORIZABA
Suelo hacer mis caminatas, ahora que ya medio puedo, por los sitios orizabeños donde el turismo los fines de semana abarrotan Orizaba. Hubo una semana pasada, que no encontraban hoteles, me habló una gente que venía de Veracruz y otra de Puebla.
Y como El Orbe está cerrado, pues allí había 70 habitaciones, ya abrirá pronto, pero vienen más hoteles, uno de ellos Los Balcones, en pleno centro histórico, con estacionamiento propio y elevador, y el ayuntamiento se pone las pilas y ahora remodelan cinco calles de ese centro, para hacerlas más peatonales, con un solo carril para los automóviles y bancas y macetones que le darán vida.
La calle Colón sigue siendo muy peatonal, con sus negocios floreciendo, lo mismo restaurantes, en uno de ellos ahora voy mas seguido, El Quintal, frente a la Alameda, sirve que termina uno el desayuno y te das una vuelta a esa Alameda que es la mejor del país, quitando la famosa Alameda Juárez de CDMX.
Orizaba tiene encanto, Casavegas sigue brillando, el Tobogán de la Montaña lo disfrutan propios y turistas, el Polifórum, con sus grandes tiendas y restaurantes, parques de los dinosaurios, El Biori, un paraíso de la vegetación. Cafeterías nuevas, plazas comerciales como la de Cerritos, espacios para que la gente pueda pasear con sus pequeños, el trenecito santanderino llamado Chipi Chipi, cuyos fondos son para el apoyo a los niños con cáncer, de parte del DIF.
Orizaba tiene todo, hasta las lluvias que por las tardes refrescan el alma, sin olvidar la joya de la corona, El Teleférico, que tendrá próximamente seis cabuses mas, porque la demanda es mucha y, arriba del Cerro del Borrego, pondrán un panel de cristal, como los hay en el mundo, donde se ve el abismo y a veces da mello subirse a ver la altura de ese Cerro.
Vengan, no se arrepentirán, hay mucho que ver de este Pueblo Mágico.