MI BATALLA


Luis Antonio Pérez Fraga
 
Sin duda todas las guerras o batallas son ¡terribles! Así cómo indeseables, pero a veces también son… inevitables. 
 Justo como lo que está pasando ahorita en Israel que fue atacado por Irán, no fue un ataque de a gratis, pues fue una represalia o venganza en contra del ataque que el propio Israel había realizado bombardeando la embajada de Irán en Damasco en donde murieron ocho altos diplomáticos iraníes, (también en represalia pues Irán ha financiado a muchos enemigos de Israel) y hoy la respuesta no se hizo esperar y han mandado más de 300 drones cargados de explosivos que, afortunadamente, causaron daños menores y, al parecer, solamente hubo una menor de edad fallecida a consecuencia de dicho ataque. 

Pero también hay batallas individuales, como la que un servidor está enfrentando hoy en día, que tal vez sea la más dura y difícil que haya tenido a lo largo de mi vida, pues en 61 años he enfrentado todo tipo de enfermedades, adversidades, broncas económicas, estudiantiles, etcétera, hasta ahora que me estoy enfrentando a la más difícil… mi batalla contra el cáncer. 
 
Y tal como se los ofrecí a todos los lectores y lectoras que me hacen favor de leer mis colaboraciones, aquí en mi querido NOTIVER desde hace 20 años, les sigo haciendo la reseña de los efectos, el tratamiento, y los síntomas de esta terrible enfermedad ancestral que a pesar de los esfuerzos y los avances de la ciencia aún les falta mucho para poder vencerla o para encontrar una vacuna o cura efectiva. 
 
Mi tratamiento constó de cuatro quimioterapias y 32 inmunoterapias en total, hasta el momento, pues este se puede modificar de acuerdo a las reacciones o hallazgos que se pueden dar en cualquier momento, por ejemplo, después de cumplir con mis cuatro quimioterapias y con seis de las inmunoterapias (que se aplican cada tres semanas ambas) y que por fortuna no me indicaron hasta el momento radioterapias (pues me dicen que son las más agresivas) por lo que he tenido una enfermedad manejable y soportable hasta el momento. 
 
Después de las cuatro quimios, me mandó mi excelente oncóloga la Dra. Carolina Blanco del Hospital ABC, a realizar otra prueba PET (que es una tomografía de cuerpo completo) para ver si el tumor de pulmón no había hecho metástasis en diversos órganos del cuerpo, ya que a muchas personas en un periodo menor al mío se le extienden los tumores a diversas partes del cuerpo, a los ganglios, al cerebro, a la sangre, etcétera, no sé si afortunada o desafortunadamente, pero solamente me encontraron un pequeño tumor adicional (de 16mm o 1.6cm) en el hígado. 
 
Primero me espanté mucho ante el hallazgo, pero mi doctora me dijo que el tumor primario me había bajado 0.8% y que ese nuevo era algo esperado y no tan grave ya que a veces esta enfermedad se expande en casi todo el cuerpo y en mi caso solo era ese pequeño tumorcillo y que por ello me iba a indicar una operación por laparoscopia (con agujas) para dos procedimientos: uno; hacer una biopsia para checar si el nuevo tumorcito era benigno (en cuyo caso no habría que hacer nada) o si era maligno, confirmar si provenía del tumor primario de pulmón o era un tumor nuevo (los resultados de la biopsia me los dan dentro de una semana) y el segundo procedimiento, fue cauterizarlo con calor a modo de encapsularlo y que ya no creciera, la operación fue todo un éxito afortunadamente, y la única molestia ha sido obvio el dolor de hígado, pues recibió tanto una biopsia o rebanada de bistec de hígado jajaja y una quemada, yo por lo regular no soy chillón para los dolores pero ¡ay nanita! este si “me lolió” jajaja. 
 
Hoy lunes 15 de abril me toca la séptima inmunoterapia aquí en Veracruz, que como les he platicado es lo último contra el cáncer, ya que educa a tu propio sistema inmune para fortalecerlo y madrear, con tus propias células buenas a las malignas, por cierto, acabo de leer en una revista que se llama “Alimente” sobre los efectos del aceite de omega 3 o de salmón en apoyo de la inmunoterapia, dice que han obtenido resultados sorprendentes, me indicó la doctora que me comprara el suplemento de omega 3 pero no en cápsulas ya que no son efectivas sino en botella que es de una marca que se llama Lysi y la venden en Costco, y debo tomar 7 ml por la mañana y 7 por la noche, ya que es la presentación que es la más eficaz del omega 3, que es muy similar al que tomamos casi todos quienes andamos entre los 50 a 90 años de niños con el aceite de hígado de bacalao, que sabía de los mil demonios, pero hoy se lo puede dar usted a sus hijos sin que lo repelan tanto, pues ya lo fabrican en sabores de naranja, fresa o piña y no sabe tan horrible.
 
Les comparto a continuación unos fragmentos del apoyo que provoca el aceite de omega 3 a la inmunoterapia en esta lucha contra el cáncer, tal como se lo ofrecí a quienes, o están enfrentando esta enfermedad, o por prevención, o tienen algún familiar que esté en la batalla, o por simple cultura general: 

“Se inhibió el crecimiento tumoral.
Los investigadores utilizaron ratones a los que se les inyectó tumores primarios y metastásicos.
Comenzaron alimentándolos con una dieta estándar o una dieta alta en omega-3 durante 10 días antes de inocular el tumor.
Una semana después de inyectar los tumores, los ratones de cada grupo de dieta comenzaron con inmunoterapia, terapia antiinflamatoria, ambas terapias juntas o ningún tratamiento.
 
La incorporación de suplementos con ácidos grasos omega-3 en la dieta bloqueó el crecimiento del tumor en ratones tratados con inmunoterapia, inhibidor de SEH o ambos tratamientos usados juntos.
En ratones que recibieron la dieta alta en omega-3 y ambos tratamientos contra el cáncer, se inhibió hasta un 67% el crecimiento del tumor en comparación con los ratones que no recibieron tratamiento y una dieta normal.
La inmunoterapia y el tratamiento SEH fue más eficaz con dietas enriquecidas con omega-3.

Los científicos ahora están centrados en realizar estudios adicionales con tejidos y células cancerosas humanas, células inmunitarias humanas y modelos animales con el fin de dar una nueva arma en el tratamiento de pacientes con cáncer.”

P.D.- Los mantendré informados estimados amigos y amigas, pero recuerden que la principal batalla la enfrenta uno mismo con su cerebro, con su entusiasmo, con su optimismo, y con la absoluta seguridad de que cualquier adversidad la podemos vencer con fuerza, voluntad y mucha fe en Dios.
 
Los Co-mentarios en: lperezfraga@yahoo-com.mx