Por Andrés Timoteo

CUMBRES BORRASCOSAS

Todos mienten, no importan que tengan un balazo en el cuerpo o que alguien haya muerto. La narrativa del gobernante en turno, Cuitláhuac García sobre la inseguridad en la autopista Orizaba-Esperanza es tan tozuda que pone en tela de juicio los hechos violentos ahí sucedidos: asaltos masivos, tiroteo de vehículos y asesinato de viajantes.

Reduce la violencia imparable a "hechos aislados". Hace unas semanas se perpetró un asalto colectivo a los automovilistas que transitaban por las Cumbres de Maltrata. Ellos fueron amagados a punta de pistola por un grupo de delincuentes para que les entregaran dinero y otros bienes.

¿Qué dijo el gobernante? Que había sido una mentira, que no pasó nada a pesar de que la propia Dirección de Caminos y Puentes Federales (Capufe) dio cuenta del hecho en sus redes sociales.

La semana pasada atacaron a balazos a los vehículos en que los que viajaban integrantes de una banda musical y uno de los encargados de la seguridad de los cantantes falleció al ser alcanzado por los disparos.

La noticia fue nacional, pero García Jiménez la minimizó aduciendo que era un "hecho esporádico".

Casi al mismo tiempo hombres armados -se presume que fueron los mismos – balearon el vehículo en que le viajaba en ese mismo tramo el parapentista Benjamín Silva. Este logró huir con vida aun cuando fue impactado en una pierna.

"Me rozaron balas en la cabeza, usaban un rayo láser para indicar el blanco", relató Silva quien también grabó en video el ataque. Los conocedores dicen que el uso de ese tipo de armas con apuntador láser no corresponde a la delincuencia común.

Entonces, en las Cumbres de Maltrata opera un cartel dotado de recursos para adquirir ese tipo de armamento y tener francotiradores entrenados.

Ante la declaración del deportista, García Jiménez insinuó que todo se trató de un montaje y que la víctima es parte de un complot para desprestigiar la vía y su gobierno. Se basó en que parapentista filmó el suceso y su deducción es que eso indica que fue parte de un escenario para recrear un falso ataque.

¿De qué nivel es su indolencia, o más bien su irresponsabilidad, para sugerir tal cosa? Vaya, del "¡aquí no pasa nada!" de Javier Duarte se pasó al sí pasa pero todo es falso no importa que haya heridos y muertos.

Lo anterior acompañado con la promesa de siempre -y siempre falsa – de que se reforzará la vigilancia en la autopista y que no se permitirá que los delincuentes hagan de las suyas.

Pero si las hacen y llevan tiempo así. Los usuarios de la autopista están en indefensión por la indolencia e irresponsabilidad de García Jiménez que los ha dejado a merced de los criminales que ya hicieron de las Cumbres de Maltrata su coto de caza.

Por eso son borrascosas esas cumbres, no solo por la situación peligrosa a la que se enfrentan los automovilistas sino por la turbiedad en el pensamiento y el proceder de gobernante.

Su afán de culpar a las víctimas en lugar de hacerse cargo del suceso, perseguir a los victimarios y garantizar la seguridad en dicha carretera rebasa todos los exabruptos cometidos por sus predecesores.

EDILES BAJO EL ALA

Los sucesos recientes en ese tramo carretero se empatan con el clima de violencia criminal en toda la zona centro.

Ayer, sicarios 'levantaron' y asesinaron al director de Obras Públicas del ayuntamiento de Amatlán de los Reyes, Antonio Hernández Carbajal, otro acto sanguinario en ese lugar que desde el 2022 elevó su estadística de muerte y violencia.

Curioso, la violencia creció cuando comenzó a gobernar Morena con el alcalde Arturo Figueroa.

Pero no solo es Amatlán de los Reyes sino otros municipios de la región están bajo el dominio del hampa.

Los mafiosos han matado a funcionarios municipales en reclamo de acuerdos incumplidos.

En diciembre asesinaron al síndico Miguel Tinoco de Omealca. Allí gobierna la morenista Nallely Cortés.

También en diciembre mataron al tesorero de Tezonapa, Salvador Páez. Allí es alcaldesa Claudia Rosales postulada por el PVEM en coalición con Morena.

Y ya casi finalizando ese mismo mes fue victimado el alcalde de Rafael Delgado, Isauro Ambrosio Tocohua.

Sobre esos tres homicidios, el propio gobernante en turno aseguró que estaban relacionados a presuntos acuerdos que los ediles y funcionarios habían hecho con la delincuencia organizada, pero nadie está en la cárcel y ni siquiera investigado.

La coincidencia sospechosa es que casi todos esos crímenes sucedieron en municipios bajo el gobierno del partido guinda o de sus aliados.

Lo anterior a excepción de Rafael Delgado donde el edil asesinado y su suplente son de Fuerza por México (FXM), y en Maltrata, escenario de las Cumbres Borrascosas, gobierna el priista Margarito Ramírez.

Empero, la otra coincidencia es que todos esos alcaldes, sean marrones o tricolores o del FXM , están bajo el ala del secretario de Gobierno, Patrocinio Cisneros.

En esos municipios 'solo truenan los chicharrones' del bajacaliforniano.

Los alcaldes forman parte de esos ochenta que Cisneros Burgos presume orbitan en torno a su persona y a su proyecto electoral.

Son la fuerza operativa con la que amenaza a su exmadrina, la zacatecana Rocío Nahle, para hacerla perder o ganar, según sea el caso. De allí que las coincidencias son sospechosísimas.

FUE EL PARACETAMOL

Es uno de los trucos más viejos de los políticos marrulleros: "enfermarse" para evadir todo tipo de cosas. Ese pretexto chabacano lo usó el gobernante Cuitláhuac García quien reapareció luego de tres días de ausencia en el cargo argumentando que le dio un catarro y el médico le recetó paracetamol y descanso.

Por eso ni siquiera fue a Campeche para el quinto informe de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Aja sí, que le crean los ingenuos.

Ni en las peores oleadas de la Covid-19 García Jiménez se perdió un besamanos del caudillo y ahora jura que se lo impidió la moqueadera y el analgésico.

¿Por qué no fue requerido en Campeche? La incógnita persiste. Y el morbo generado no se calma con paracetamol.

*Envoyé depuis Paris, France.