Por Andrés Timoteo
UNA TRAMPA MALDITA
Esta semana se cumple un mes de que la coordinadora de Documentación, Control y Gestión de la oficina del gobernador -o sea la secretaria - Consuelo Thomas Yáñez fue exhibida operando el acarreo para el cierre regional de precampaña que realizó Claudia Sheinbaum en Jalapa, el 27 de agosto, y no ha pasado nada.
Se conoció de una llamada telefónica que hizo para coordinar el traslado de 500 personas al Velódromo de Jalapa, pero en realidad fueron varios los telefonemas y miles los acarreados cuya movilización fue a cargo del erario estatal.
Sin embargo, la señora sigue en su oficina en vez de estar en un juzgado rindiendo declaración ministerial o en una celda. No la destituyeron pese a que el delito electoral que cometió ya está tipificado como grave desde el año pasado y la Constitución ordena la prisión forzosa en su artículo 19.
Cuitláhuac García, su jefe, también es un delincuente electoral pues él le dio la orden de infringir la ley, Y también ahí sigue campante sin ser investigado.
Alega que no escuchó los audios de Thomas cuando la prensa le preguntó, pero es un argumento fútil.
No era importante que él los escuchara sino que respondiera y actuara al respecto. La que sí debió oírlos y procesarlos como material para abrir una carpeta de investigación es la fiscala Verónica Hernández, pero no lo hizo.
Lo hicieron adrede para que se diluyera el tema.
Así la famosa "Ana Barbara veracruzana", como le gustan que le digan en su mundillo 'chocholero', continúa en la nómina pública y cantando -en versión aldeana aguindada – "tu amor es una trampa,/ una trampa maldita".
Y su caso conduce a otra futilidad comprobada, la de los que encabezan la oposición local que solo un par de días retomaron el asunto aunque nada más para hacer escándalo mediático.
Se confirma lo que se expuso en el texto anterior sobre los dirigentes, legisladores y demás referencias de los partidos "opositores" que se la han pasado holgazaneando y de agachones a pesar de que los cuitlahuistas les entreguen 'perlas' para armas denuncias, promover exigencias, mantener el señalamiento y la critica permanente en beneficio de la legalidad, la transparencia y la democracia.
No han hecho nada. ¿Alguien recuerda a un priista, panista o perredista que se haya apersonado en la Fiscalía General para presentar una denuncia formal contra la secretaria de García Jiménez? Nadie. ¿Llevaron esa denuncia a la tribuna del congreso local para exponerla? Tampoco. Se limitan a las acusaciones de saliva.
Así es la oposición veracruzana, liviana, salivosa y haragana.
Lo mismo con el uso de ambulancias en el ayuntamiento de Miahuatlán para acarrear gente al mitín de Sheinbaum. Ya se olvidaron del caso.
En tanto, el gobierno estatal prefirió castigar a los miahuatecos quitándoles el vehículo de emergencia que poner frente a la ley a la síndica del lugar, Nellyda Bárcena Vitte, y su hermana de nombre, Yareth, que son otras delincuentes electorales.
Desde hace semanas Miahuatlán no tiene ambulancia pública por lo que los enfermos, las personas discapacitadas y otros necesitados están en la indefensión y tienen que recurrir a servicios particulares o a la buena voluntad de terceros para trasladarse cada vez que tienen una emergencia médica o una consulta programada fuera del municipio.
OFICINA BOTADA
El cuitlahuismo se desquita con los más débiles en lugar de escarmentar a esas pillas electorales. Ninguna ha sido molestada por la Fiscalía pese a que hay denuncias abiertas tanto por el uso de recursos públicos para asuntos electorales como por la agresión contra la periodista jalapeña Verónica Huerta aquel mismo 27 de agosto cuando las filmó en flagrancia cometiendo el ilícito electoral.
Las hermanas Bárcena siguen intocables no porque sean muy influyentes sino porque pertenecen a la misma banda morenista que atropella la ley.
Ah y los integrantes de la Comisión Estatal de Protección -risas- a Periodistas solo hicieron la pantomima en el caso de la reportera agredida con un boletín -mal redactado, para no variar– para comunicar la apertura de un supuesto expediente.
Eso y nada es lo mismo. Aunque la periodista Huerta no debe estar sorprendida pues es a lo que se atenía recurriendo a ellos.
Además, a guisa de justificante para los antes desocupados comisionados, estos ya no están ociosos sino ocupados...pero en asuntos partidistas.
No tienen tiempo para la reportera Huerta ni para otros periodistas en predicamento.
Los comisionados dejaron botada la oficina para abocarse a promover a la zacatecana Rocío Nahle en sus aspiraciones para ser la candidata de Morena al gubernatura veracruzana.
No se especula ni se miente, el que lo dude solo debe leer las columnas y "notas" informativas que escriben esos personajes, bueno los que todavía se dedican al periodismo, para comprobarlo.
Lo mismo sus 'tuits' e 'hilos' de conversación en las redes sociales pues todos están dirigidos a promocionar a Nahle.
Vaya, tal deriva no sucedió ni cuando los ginistas-duartistas Namiko Matzumoto, Benita González y Jorge Morales presidieron la paquidérmica comisión.
OLVID" EL OFICIO
Hablando de periodistas chuecos, hay otro que está en el ojo público porque olvidó los principios básicos del oficio que es estar a favor de las causas justas.
Se trata Félix Olarte quien antes de sumarse a Morena laboró en varios medios informativos del sur de la entidad.
Hoy como síndico en Nanchital da la espalda a sus coterráneos que tanto lo procuraron cuando era reportero.
Cuentan que hasta le pagaban la gasolina y la 'comida corrida' en sus tiempos bajos, pero ahora se comporta prepotente con ellos, no los recibe y hasta los injuria.
Olarte se puso del lado de la alcaldesa Esmeralda Mora, niega a los ciudadanos la información jurídica del proyecto del relleno sanitario y lo peor es que sería el autor de la campaña mediática de denuesto que localmente se endereza contra los activistas que encabezan el movimiento.
Un caso nietzscheano: se convirtió en el monstruo que decía combatir.
*Envoyé depuis Paris, France.