Por Andrés Timoteo
ADVERTENCIA QUERETANA
Ahora que se abrió el registro para los que buscarán la candidatura del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) por la gubernatura se pronostica que aumenten las tensiones entre las hordas guindas, aunque con escasa posibilidad de ruptura interna porque casi todos los que participarán son simuladores.
Igual que sucedió a nivel nacional, en Veracruz hay una favorita que se beneficiará con 'dedazo' del altiplano, otros que le harán comparsa para tratar de legitimar la imposición, y tal vez solo haya uno que le competirá realmente, aunque en desventaja.
Es el minanteco Sergio Gutiérrez Luna, opositor y real contrincante genuino de la zacatecana Nahle.
Se enfrentará al aparato estatal, a la 'cargada' al estilo del viejo priismo, a las campañas de denuesto, que no son nuevas para él pero que se intensificarán, y a otras puyas desde el cuitlahuismo.
Sin embargo, Gutiérrez tiene una ventaja que su contendiente no la puede obtener ni con todo el presupuesto público ni los grupos de ´mapaches' que la arropan: el origen.
Él sí es veracruzano mientras que Rocío Nahle es zacatecana y ni vistiéndose de jarocha logra convencer, vaya ni si siquiera aparentar que pertenece al estado.
Eso pesaría en la encuesta, aunque tampoco es garantía de le sea fatal pues se prepara el chanchullo para torcer la medición demoscópica.
Empero, aunque el legislador sureño no sea el ganador del proceso interno, el repudio a Nahle por no ser veracruzana seguirá inalterable.
Seguramente la impondrán como candidata, pero nada le retirará tal estigma.
En el 2024, los electores veracruzanos deberán decidir entre votar a una arribista-advenediza o a una veracruzana o veracruzano auténticos.
Eso no lo podrán evitar los tramposos marrones ni con todo el dinero público ni con toda su propaganda hechiza.
Por cierto, en Querétaro hay una leyenda llamada "La Zacatecana" y trata de una mujer originaria de aquel estado que llegó a la capital queretana para casarse con un aristócrata.
Con el tiempo, la zacatecana lo traicionó siéndole infiel. Además lo mandó a asesinar y mató al verdugo para que no la delatara. Y se quedó con la fortuna del marido al que sepultó en las caballerizas.
Sucedió en el siglo XVII y en el centro histórico de Querétaro esta la mansión que habitó "La Zacatecana" que actualmente es un museo donde se exhiben muebles, pinturas, joyería, porcelanas, tapices y otras piezas de valor económico e histórico que fueron parte del botín que la "Zacatecana" le robó a la acaudalada familia queretana.
¿Advertencia para los jarochos? Suena así. Aquel rico hacendado le dio el "sí" a una foránea y le abrió las puertas de su próspero hogar, pero esta no solo lo traicionó sino que lo eliminó físicamente y se apropió de la fortuna familiar.
Tan infame resultó esa mujer que hasta se convirtió en leyenda.
Dicha leyenda es una alarma para los veracruzanos.
¿Le abrirán estos su casa a otra zacatecana que ya trae la fama de timar y apropiarse de lo ajeno? Deberían hacer caso a lo dicho por el filósofo de Ciudad Juárez: sobre aviso no hay engaño.
VIOLENCIA DOMÉSTICA
Otro que vino de fuera -de Baja California – para hacer fortuna en Veracruz es Patrocinio Cisneros, el secretario de Gobierno que amaga con inscribirse para disputarle la candidatura a su creadora y exjefa política, Nahle García.
Sobre él también se cuentan leyendas urbanas: que es afrodescendiente indómito, que tiene poderío, que lo respaldan casi todos los alcaldes del estado, que es el verdadero mandamás en el gobierno estatal y que tiene sometido y sobajado a Cuitláhuac García, pero todo como papel que se puede mojar.
El tipo no es incontrolable sino fácil de apaciguar si se tiene la voluntad política.
Para empezar, su "grupo político" es circunstancial y sin la fuerza suficiente para mantenerlo sin el cargo que ostenta. Bastaría con destituirlo para que automáticamente pierda los instrumentos de control como son el presupuesto y las influencias.
Sin ellos ya no podría amenazar ni chantajear a los noventa alcaldes que presume tiene de su lado ni tampoco a otros funcionarios públicos o actores políticos.
Algunos dicen que conservaría su poder a través de la fiscala Verónica Hernández, su 'chalana', pero ese alegato es precario.
Solo recuerden cómo destituyeron al oaxaqueño Jorge Winckler en el 2021 y esa misma charada le pueden aplicar a Hernández Giadáns además de mandarla a la prisión, y vaya que tiene pillerías en su haber para presentarla ante un tribunal.
¿A poco alguien cree que la fiscala seguiría siendo leal y obedeciendo a Cisneros con el amago de destitución y mazmorra? Claro que no y ahí se acabaría el reinado del auto-proclamado el "Yanga liberador" de la actualidad. Risas.
Su poder es una pompa de jabón frente a las posibilidades del aparato estatal. Sin embargo y como ya se ha dicho, la debilidad final en Patrocinio Cisneros sino en su jefe Cuitláhuac García a quien le tiemblan las corvas cada vez que le plantean separar del cargo al pendenciero colaborador.
Algo muy grave le sabe Cisneros a García. Su poder se basaría en esa información complicada pues de lo contrario no se atrevería a enfrentarlo y desobedecerlo ni mucho menos a ignorar al mismo presidente Andrés Manuel López Obrador.
La última mofa de Cisneros hacía su jefe inmediato es que hizo lo contrario a lo que García anunció públicamente de que no participaría en la búsqueda de la gubernatura.
Al bajacaliforniano le valió sorbete y se inscribirá -o ya se inscribió- para tal postulación.
Tal vodevil nunca había sucedido en Veracruz y eso que han habido gobernadores desentendidos del quehacer de gobernar, pero que no perdieron el control del gabinete.
Hay una relación tóxica entre ambos, uno ejerce violencia doméstica sobre el otro desobedeciéndolo y contradiciéndolo en público, aunque el gobernante parece disfrutarlo debido al masoquismo político que lo hace sufrir y gozar al mismo tiempo.
El espectáculo es lastimero, pero no es para ponerse a llorar sino para destornillarse a carcajadas.
*Envoyé depuis Paris, France.