Por Andrés Timoteo
LOS AGACHONES
No son Los Agachados, como los del libro de Rius, el celebre caricaturista, sino Los Agachones.
Eso sí, son tan caricaturescos y esperpénticos como los que aparecen en la historieta del monero. Y abundan en la principal casa de estudios en Veracruz.
El agachón más agachado se llama Martín Aguilar, rector de la Universidad Veracruzana (UV) y lo secundan los 212 integrantes del Consejo Universitario que aceptaron el robo que está por perpetrar el gobierno cuitlahuista.
Es la segunda ocasión que estos consejeros - casi todos académicos e investigadores, o sea gente pensante y que hasta llegan a asumirse como activistas- admiten el despojo financiero a la UV. Ya lo hicieron en este 2023 y lo repiten para el 2024.
Se convirtieron en cómplices del latrocinio cometido por la Secretaría de Finanzas y de la violación al artículo 10 de la Constitución de Veracruz que establece que la casa de estudios debe recibir lo equivalente al 4 por ciento del presupuesto general para la entidad.
Al principio -ojo, esto es importante- la rectoría hizo el cálculo que para el 2024 le correspondía a la UV un fondo de 9 mil 524 millones 339 mil pesos.
El gobernante en turno, Cuitláhuac García se rió y anticipó que no cumpliría con el mandato constitucional.
Luego la UV rebajó el monto -haciendo las 'cuentas del chino'- a 4 mil 558 millones de pesos y ni así se lo aceptaron.
Y el rector Aguilar no dijo nada, se limitó a hacer unos foros insulsos para "concientizar" a la población de que la universidad se merecía tal presupuesto, pero nunca confrontó al gobierno morenista.
Al final, según el proyecto del Presupuesto de Egresos para el 2024 presentado al Poder Legislativo solo se le otorgarán 3 mil 657 millones 530 mil pesos, es decir 901 millones menos que el requerido en el último planteamiento y 5 mil 867 millones menos respecto a la primera cifra solicitada.
¡Un robo en descampado! El cuitlahuismo está igual que el duartismo: atracan a la universidad pública sin recato, pero al menos Javier Duarte no estudió en la UV, pero Cuitláhuac García sí y hasta fue maestro en sus aulas.
Lo mismo que el truculento secretario de Finanzas José Lima que allí hizo sus estudios.
Ambos le roban a su propia 'alma mater'. Pero dan más vergüenza el setentero rector Aguilar Sánchez -no porque tenga 70 años sino por sus ideas de la izquierda retardataria de aquella década- y los consejeros universitarios que avalaron el desojo financiero.
JUICIO OBLIGADO
El Consejo Universitario sesionó el pasado 13 de noviembre y 212 de sus miembros votaron a favor del robo, 25 de ellos fueron cobardes y se abstuvieron hasta de emitir un sufragio y solo 42 consejeros mantuvieron la dignidad, la coherencia y la defensa de la casa de estudios.
Los que validaron la transa se atrevieron a emitir un boletín descocado en el que confiesan su complicidad en la ilegalidad:
"Lo que se ha negociado con voz y acción pacífica -léase con blandenguería-, a la vez imperante para el bien institucional, son la forma en que se van a hacer llegar los recursos y un presupuesto suficiente para cubrir las necesidades".
Traducción: Nos robaron, pero nos conformamos que nos den para el gasto del día.
Además, los concupiscentes consejeros liderados por el rector Aguilar todavía se burlan con un último párrafo:
"Se dejó en claro que lo anterior no implica que la UV deje de solicitar para los siguientes ejercicios presupuestales el 4 por ciento del presupuesto general del estado que le corresponde de acuerdo con la constitución".
Traducción dos: Ahí para la otra. Que este gobernador despoje a la universidad a su antojo y ya el año próximo le rogaremos al nuevo gobernante o gobernanta.
Pues que mejor se sienten a esperar porque si queda la zacatecana Rocío Nahle les dará puro dulce de Puebla pues ella no está ligada a Veracruz ni mucho menos a la Universidad Veracruzana. Si fuera la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), su 'alma mater' tal vez habría una oportunidad. Risas.
Si los funcionarios universitarios fueran decentes y respetuosos de la ley promoverían una controversia constitucional para obligar al cuitlahuismo a entregar el dinero que legalmente le corresponde a la UV y la ganarían fácilmente, pero no lo harán porque se agacharon y se bajaron los pantalones.
El setentero Aguilar y su séquito de incondicionales prefieren dejar a la casa universitaria con carencia de fondos para nuevos proyectos, investigaciones y una matrícula más amplia que defenderla de los morenistas que la atracan como ladrones de callejón.
Cuando gobernaba Duarte que también le robaban, al menos los consejeros y la rectora en turno, Sara Ladrón de Guevara sacaron la casta y salieron a las calles a defender la institución.
Ahora no porque Aguilar Sánchez antepone su militancia partidista al compromiso con la casa de estudios. Sin duda el rector y sus consejeros son dignos habitantes de Chayotitlán de los Magueyes, el pueblo de Los Agachados de Rius.
ECOLOCO LOCO
Anda desbocado el hidalguense Ricardo Ahued, alcalde morenista de Jalapa, pues no conforme con haber talado decenas de árboles en la avenida Lázaro Cárdenas y en la zona de Las Trancas ahora ordenó rebanar casi en su totalidad el árbol ubicado frente a la biblioteca Carlos Fuentes, uno de los pocos ejemplares adultos que hay en el zócalo jalapeño.
Por supuesto que la ciudadanía protestó, pero el edil contestó con el clásico argumento de los depredadores ambientales que tienen poder: que el árbol estaba viejo, tenía plagas y sus ramas eran una amenaza mortal para la gente.
Es la lógica de los estultos, pero si a los viejos y enfermos hay que mocharlos pues que el edil se auto-mutile para que sea coherente con su filosofía, ¿no creen?
Lo más insolente es que Ahued está pagando gacetillas y tinterillos para que enderecen ataques contra los ambientalistas, los amenaza con multas por 2.5 millones de pesos y prisión si continúan denunciando sus ecocidios. ¿Cómo la ven? El edil 'ecoloco' ya enloqueció más.
*Envoyé depuis Paris, France.