Por: Andrés Timoteo

EL HIJO DE BECEIRO

A continuación va un cuento de hadas: los empresarios veracruzanos piden a la zacatecana Rocío Nahle que no haga un cambio en la política ni en la atención para con los inversores pues están muy contentos de cómo llevó las cosas Cuitláhuac García y su secretario de Desarrollo Económico, Enrique Nachón.

Es más, aunque se pusieron tristes porque Nachón García no repetirá en el cargo, les alegra que su sustituto sea Ernesto Pérez de quién esperan continuidad en la dependencia para "seguir desarrollando los programas que han funcionado", declaró en días pasados Fernando Arana Watty, presidente del Consejo Empresarial Metropolitano de Xalapa (CEM).

"Que no se resienta el cambio de gobierno ni se frene el desarrollo de los sectores productivos de Veracruz y que se mantengan abiertas las puertas como sucedió en este gobierno, lo que originó un diálogo abierto y trabajo en equipo (empresarios y autoridades)", aseveró.

Semanas antes, cuando Nahle comenzó a revelar los nombres de su gabinete, el mismo tipo se soltó en fanfarrias:

"Les tenemos la mano extendida, les otorgamos toda nuestra confianza como lo hicimos con esta administración (la de Cuitláhuac García)".

¿A poco no suena a la descripción del País de las Maravillas?

Lo real es que Arana Watty solo habla por él, no por todos los empresarios ni de Jalapa ni del estado al implorar continuidad y olvidar comedidamente los temas necesariamente ligados al desarrollo empresarial como la seguridad, la promoción turística, los asuntos hacendarios y la certeza jurídica.

No ve los negocios quemados en el sur y norte de la entidad ni demásamenazas y secuestros de los empresarios para que paguen 'derecho de piso" al crimen organizado.

Tampoco los asaltos de camiones transportadores de mercancías en carreteras.

Obvia los 'moches' que exige el procurador del Medio Ambiente, Sergio Rodríguez Cortes, a los empresarios bajo amenaza de ser auditados y clausurados "por contaminar".

Arana no se acuerda que otro dirigente empresarial jalapeño, Juan Carlos Díaz Morante de la Coparmex, apenas en octubre del año pasado denunció esas extorsiones.

El obsequioso líder del CEM tampoco considera negativo que en el periodo de la pandemia de Covid, el gobierno cuitlahuista se negó a apoyar a los empresarios y estos tuvieron que despedir a los empleados y muchos no lograron reabrir sus negocios.

Todo eso quiere que continúe durante el nahlismo.

¿Es ingenuidad o complacencia mezclada con complicidad? Lo segundo.

Este empresario es un dirigente cómodo para el oficialismo.

Por eso el cabezal del texto que no se refiere a que Arana sea hijo biológico de Andrés Beceiro López quien por años se adjudicó la representatividad del empresariado y siempre lanzó lisonjas a los gobiernos del innombrable y de Javier Duarte.

Beceiro nunca vio el desastre ni el latrocinio ni la ineficiencia de los funcionarios fidelistas y duartista, y para él Veracruz era un paraíso.

Así ahora Arana Watty quien es su heredero en esa vocería complaciente.

¿Y EL RELOJ?

Es pertinente recordar que por allá del 2005, Beceiro creó el Consejo Coordinador Empresarial del Estado a petición del innombrable para hacer un contrapeso artificial a los poderosos organismos empresariales de la zona conurbada Veracruz- Boca del Río a los que el gobernante acusaba de pro-panistas.

Años después, a finales el duartismo, hubo rebelión en ese organismo fidelista y lo echaron, pero Beceiro dio de alta otra organización hechiza llamada Alianza Ciudadana de Empresarios Veracruzanos para seguir hablando a nombre de los inversores y tratar de mantener sus contratos de proveeduría con el gobierno estatal.

Por cierto, uno de los que lo traicionó, Jesús Castañeda Nevárez, hace ocho años encabezó la exigencia para que el gobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares les pagara un adeudo millonario que les dejó pendiente Duarte de Ochoa.

Yunes se rió de ellos y los acusó de ser "coyotes" porque ni siquiera tenían facturas para comprobar la deuda.

En revancha, Castañeda junto con el panista Alejandro Cossío formó la Asociación de Empresarios SOS para hacer campaña a favor de Cuitláhuac García y de Morena, y a Yunes Linares le pusieron un reloj digital en cuenta regresiva frente a palacio de gobierno.

El reloj fue acompañado con el anuncio de que harían un festejo popular en Plaza Lerdo con música en vivo, pambazos, tamales y atole pues el mala-paga de Yunes se iba y llegaba Cuitláhuac quien sí les iba a saldar lo que les debían.

¿Y qué pasó? Cuitláhuac García ni les pagó ni los 'fumó' en todo el sexenio.

Fue el 21 de agosto del 2018 cuando estos empresarios liderados por Castañeda y Cossío instalaron el reloj.

Entonces, ahora que García Jiménez va a rendir su último informe el próximo domingo 18 -según dicen-, ¿no es una fecha ideal para que le coloquen su propio cronómetro en cuenta regresiva?

Por supuesto que sí, lo malo es que nadie sabe dónde están Castañeda y Cossío que eran muy bélicos en el 2018 y ahora andan perdidos en alguna galaxia lejana.

Lo peor es que lo único que tienen los empresarios es al tal Fernando Arana quien se descose en zalamería. Risas.

*Envoyé depuis Paris, France.