Por Andrés Timoteo

EL PUÑADO
Varios se han mofado de que al gobernante en turno, Cuitláhuac García, lo marginaron de las decisiones sobre las candidaturas a cargos legislativos pues le atajaron a sus colaboradores y parientes que necesitarán fuero o querían seguir viviendo del erario.

Pero en realidad no le quitaron todo, le dejaron unos cuantos espacios, aunque no todos seguros.

O sea, son curules que deberán ganarlas o esperar los conteos comiciales para ver si las acceden.

Es un puñado de cuitlahuistas que sí fueron nominados.

Uno es Zenyazen Escobar, de los favoritos de palacio que fue secretario de Educación.

Le concedieron la candidatura a la diputación federal por Córdoba, aunque lo pusieron a ganarse el voto por primera vez ya que si bien fue diputado local hace tres legislaturas lo hizo por la vía plurinominal.

En el distrito 5 va el exalcalde de Poza Rica, Francisco Velásquez también de esa cepa.

Prueba de ello es que en el inicio de su campaña lo arroparon Eleazar Guerrero, primo del gobernante, y Jorge Sisniega, director administrativo de la Secretaría de Salud.

Ambos son los operadores de los negocios de la familia García Jiménez-Guerrero.

Y el pozarricense 'dobleteó' pues también va como suplente en la lista de candidatos plurinominales a San Lázaro haciendo mancuerna con el propio Eleazar Guerrero, el titular de la fórmula.

Otras cuitlahuistas que sí obtuvieron candidaturas son Ana Miriam Férraez en Jalapa y Elizabeth Cervantes en Álamo.

En cuando a las diputaciones locales, del grupo cuitlahuista está Tania Carola Viveros que va por el distrito de Emiliano Zapata.

Por la vía plurinominal va Alejandro Porras, un huatusqueño que es líder nacional de las juventudes morenistas y apadrinado por Esteban Ramírez Zepeta, actual dirigente estatal de Morena, ligado por antonomasia al gobernante.

Ramírez también está en esa lista, aunque como suplente de Diego Castañeda, exsubsecretario de Gobierno.

Castañeda no es cuitlahuista sino nahlista y por estar en la segunda posición es seguro que obtenga la curul.

La versión es que solicitará licencia para incorporarse al gabinete estatal si la zacatecana Rocío Nahle gana las elecciones y le dejaría el asiento parlamentario a Ramírez Zepeta.

PLATO SERVIDO

La que más destaca en este rejuego es la exsecretaria del Trabajo, Dorotea García Cayetano, hermana del gobernante, según los díceres, que compite por el distrito 10 de Jalapa.

Ella es el principal blanco para el voto de castigo porque haciéndola perder los jalapeños se vengarán de Cuitláhuac García.

Porta los odios contra el mandatario, aunque ella misma se ha ganado con creces el repudio popular debido a sus abusos, engaños y burlas contra la gente cuando estuvo en posiciones de poder.

Siendo diputada federal mandó a colocar lavabos portátiles en las calles de la capital para que los transeúntes se lavaran las manos pues flameaba la pandemia de Covid, ¡pero ninguno de los cachivaches tenía agua!

Solo estorbaban las banquetas.

También prometió gestionar fondos para la recuperación del Santuario de las Garzas, un predio boscoso donde aparecieron varios cuerpos de víctimas de feminicidio, y alardeó que "las jalapeñas volverían caminar seguras por allí".

Nunca lo hizo, el lugar sigue abandonado y peligroso.

Luego se supo que sí hubo recursos, pero no los aplicaron. Se los robaron, pues.

Ya en la Secretaría del Trabajo obligaba a los empleados para ir de acarreados a los mitines de Nahle y Claudia Sheinbaum bajo amenaza de despido.

Además los hacía pagar su pasaje y comida.

Los burócratas no se la perdonan, prometen votar en su contra y promover el sufragio de castigo entre familiares y vecinos.

La venganza está servida en plato sobredorado porque ella es el objetivo más apetitoso para el desquite contra el cuitlahuismo.

Todos saben que votar por ella o por los otros cuitlahuistas es votar para que García Jiménez tenga un retazo de poder en los tres años venideros.

De ahí la importancia de ignorarlos el 2 de junio.

REMATE DE SALDOS

Otra posición cuitlahuista sería Rafael Fararoni quien busca la reelección por San Andrés Tuxtla, aunque su lealtad es maleable.

Él y su papá, el exalcalde sanandrescano Rafael Fararoni Mortero al que apodan "El Rey del Vicio", apoyan al que les garantice los negocios al amparo del poder sin importar el partido político ni la ideología.

Por cierto, en el 2021 los Fararoni le compraron la candidatura al tuxtleco Juan Gómez en 25 millones de pesos -tres veces más de lo que pagó el fidelista José Ruiz por la nominación en el puerto- y el NiNi Fararoni los recuperó por mucho ya que Gómez lo puso al frente de la Comisión de Vigilancia para que lo ayudara a extorsionar alcaldes.

Esos 25 millones se sextuplicaron en tan solo un año.

¿Cuánto habrá pagado ahora por la candidatura para reelegirse?

Seguramente menos porque el vendedor ya no estará ni tendrá influencia en la próxima legislatura y los negocios los harán los nahlistas o los pepistas.

Fue remate de saldos, "El Carón" le vendió la candidatura ¡bara...bara!, aunque otros dicen que Fararoni esta vez ya le compró la postulación a los nahlistas.

¿Cambió de proveedor?

*Envoyé depuis Paris, France.