Por Andrés Timoteo
EL VACILÓN
Los incautos e ilusionados lo deben tener claro: la supuesta reparación de carreteras en el país anunciada por la presidenta Claudia Sheinbaum y que ayer inició -una semana más tarde- en Veracruz no es un 'Bachetón" sino un tremendo vacilón.
Los funcionarios les quieren ver la cara a los gobernados con un montaje para calmar los reclamos por las carreteras destrozadas del país tanto las rutas federales y estatales como las vialidades concesionadas a la iniciativa privada.
El mismo nombre, "Bachetón", es una vacilada. Se trata de una suerte de reparación 'de fortuna', como dicen en Francia, o sea una acción improvisada y hasta 'chambona' -mal hecha-.
También alude a un acto de "buena voluntad" y no una obligación oficial.
Vaya, decir "bachetón" es como invocar la recolección de croquetas, "Croquetón", para los perros callejeros o de juguetes, "juguetón", para los niños pobres.
No involucra proyectos serios para atender la infraestructura vial ni considera aspectos de ingeniería profesional como la mecánica de suelo y otros pormenores técnicos sino nada más el repellar superficialmente los baches.
Solo les faltó convocar al tequio -trabajo comunitario sin paga- para que el gobierno se ahorre la mano de obra.
En pocas palabras es como recurrir a la caridad pública para tratar de reparar las calamitosas carreteras aun cuando existe un presupuesto millonario designado para eso y la obligación constitucional del gobierno para atenderlas.
La gente no está obligada a hacerlo sino de las administraciones federal y estatales. Aún así, el programa vacilador comenzó a nivel nacional el 7 de noviembre y, ayer, a nivel estatal, pero como advierte el refrán, "el diablo se esconde en los detalles", pues de entrada el "Bachetón" excluyó a Veracruz pese a que sus vialidades parecen zonas de guerra o de caída de meteoritos.
Eso desató la crítica y puso a correr a la zacatecana Rocío Nahle -el gobernante saliente, Cuitláhuac García ni se inmutó- quien acudió al altiplano y de última hora anunciaron que Veracruz sí estaba incluido en el "Bachetón" con 16.2 kilómetros de carreteras a reparar. ¡Otro vacilón!
Más que vacilada es un burla. La entidad tiene 4 mil 121 kilómetros de carreteras, 3 mil 187 son federales y 934 son estatales, entonces lo que van a reparar con el programa federal es el 0.04 por ciento.
Una nimiedad es lo que logró para Veracruz la zacatecana Nahle ante la federación. ¡Vaciladora que es!
Tal vez se dieron cuenta del gazapo y ayer el gobernante Cuitláhuac García junto con el delegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Luis Posada, hicieron un montaje para anunciar que serán 2 mil 245 kilómetros de carreteras los que entrarán en el "Bachetón" y que todo será abundancia y felicidad para los automovilistas jarochos y los visitantes. Ajá.
Se trata de otra vacilada. Para empezar no hay presupuesto, ya está cerrado el ejercicio anual y lo anunciado es a futuro o una tomadura de pelo.
Además, al gobierno de García Jiménez le quedan quince días para concluir y no hay tiempo ni siquiera para levantar los proyectos iniciales, mucho menos para emitir y procesar las licitaciones.
Logística, temporal y financieramente es imposible.
Es un embuste burdo.
DISFRUTEN LO VOTADO
No solo en Veracruz sino en todo el país se carece de dinero para el "Bachetón", por eso se recurrirá a las reparaciones 'chambonas'.
¿Y por qué no hay dinero?
Todo se utilizó para las campañas electorales del partido Morena y sus aliados, en especial para la compra de voto y otros chanchullos a fin de forzar el triunfo de Claudia Sheinbaum.
En febrero pasado, el todavía presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó la cancelación de las licitaciones iniciadas dentro del Programa Nacional de Conservación de Carreteras para este año quitándole el presupuesto a la SCT para transferirlo a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) porque sería la encargada de reparar y dar mantenimiento a la red carretera del país.
¿Alguien vio a los soldados reparando baches, grietas o socavones? Nadie.
¿Quién puede nombrar una sola carretera que haya sido resanada por los militares? Tampoco existió tal cosa.
Todo fue una artimaña para que la bolsa con 11 mil millones de pesos quitados del Programa Nacional de Conservación de Carreteras se ocupara en las campañas comiciales del partido guinda.
Entonces, cada bache o socavón en que caigan los vehículos, cada accidente sufrido por las malas condiciones de las carreteras, cada retraso temporal en los trayectos y cada asalto de los que sean víctimas los automovilistas ya que los ladrones se aprovechan de los 'botellones' en las vialidades, se lo deben 'agradecer' al tabasqueño, a Sheinbaum y a Morena.
Ahora sí como dice el clásico: disfruten lo votado cada vez que tengan que transitar por las carreteras.
El caso de Veracruz es drama aparte porque además de que el presupuesto federal lo desviaron a las campañas partidistas, los fondos estatales para dicho rubro se los robó el cuñado del gobernante, el borrachín Elio Hernández, secretario de Infraestructura y Obras Públicas.
Él va a disfrutar lo robado.
*Envoyé depuis Paris, France.