Por Andrés Timoteo
GAVILÁN O PALOMA
Afirma el diputado Esteban Bautista, el "manejador" -así entre comillas porque no ha mostrado su autoridad- del congreso local que no va a perseguir a nadie y que el recinto legislativo "no es un palenque ni hay amarra-navajas".
¿Qué decirle a este señor?
Tal vez habrá que cantarle aquella de José José: "Pobre tonto, ingenuo charlatán".
Y advertirle que corre el riesgo de terminar siendo paloma en lugar de gavilán. Risas.
No es afán de molestarlo sino de exponerle la realidad de un modo amable y hasta musicalizado.
El legislador no quiere ver su entorno y afirma ingenuamente que el edificio de la calle Encanto no es un redondel de ambiciosos y sin escrúpulos dispuestos a darle de cuchilladas para defender intereses del presente y del pasado.
Y ya van dos navajazos que le intentan asestar.
El primero se lo lanzaron cuando lo fueron a acusar con la presidenta Claudia Sheinbaum de ser un misógino y agredir a una alcaldesa moviendo gacetillas en la prensa local para darlo por removido del cargo parlamentario.
No prosperó esa intentona, pero fue apenas el anticipo.
Días después pretendieron descomponerle la gobernabilidad en la asamblea cuando la zacatecana Rocío Nahle fue a entregar la Medalla Adolfo Ruiz Cortines usando como ariete al priista Héctor Yunes Landa quien no cayó en el garlito y además alertó al propio Bautista del complot en su contra.
Esas dos cuchilladas apenas son las más visibles, pero en la penumbra le han dedicado otras.
Por ejemplo, le intentaron 'sembrar' como operador mediático al tal Fernando Saure -le apodan "saurio" o sea lagarto- al servicio de su antecesor, Juan Gómez, a fin de controlarle el manejo de la información político-legislativa.
Y faltan más zarpazos.
A Bautista ya le tienen preparadas otras celadas, todas financiadas y pedidas por el apodado "El Carón", Gómez Cazarín, que ahora despacha en la delegación de la Secretaría del Bienestar y quien busca venganza por haber ventilado casos de corrupción y el saqueo presupuestal que cometió cuando estuvo al frente del congreso local.
El motejado "Carón" no actúa solo, Tiene a una aliada que intriga dentro de la actual legislatura, la presidenta de la mesa directiva Tania Carola Viveros, su cómplice en varias triquiñuelas para expoliar los recursos legislativos.
Viveros Cházaro encabeza una cofradía de mujeres que llevan tiempo haciendo negocios y traficando con influencias en el gobierno estatal -antes con Cuitláhuac García y ahora con Rocío Nahle- y el congreso de la entidad.
Al diputado Bautista les bastaría revisar los contratos amañados de insumos, compra de tecnología y servicios que se firmaron los últimos tres años y verá que lleva estampada la rúbrica de Irma Ariadna Leal Morales.
Ella es una de las más leales integrantes de la cofradía carolista y fue operadora de los negocios sucios de la diputada Viveros y su pareja, la secretaria de Protección Civil, Guadalupe Osorno, en el congreso local en la época de Gómez Cazarín.
DUERME CON ELLOS
Leal Morales fungió como directora de Servicios Administrativos y Financieros de la legislatura y era la que enderezaba contratos, licitaciones y concesiones a cambio de "moches", costos inflados y remanentes ilegales.
Todo está en los documentos oficiales, Bautista no tiene que buscar mucho y si le excava terminará topándose con la cofradía de Tania Carola Viveros-Guadalupe Osorno.
Por eso desde la presidencia de la mesa directiva le asestan navajazos al coordinador parlamentario.
Hasta el momento ninguno le ha sido dañino ni mucho menos mortal -políticamente hablando- pero eso no desanima a los complotistas que buscan destronarlo de la coordinación legislativa.
Y Viveros Cházaro no está sola en ese empeño. Su grupo 'anti-Bautista' lo integran también Dorotea García Cayetano, Rafael Fararoni, Paul Martínez -quien en privado y con los suyos se refiere a él como "pinche indio patarrajada"- y hasta Diego Castañeda quien está muy dolido porque él quería ser el coordinador parlamentario.
Todos son morenistas, o sea de su propio partido, y todos se conjuran en las sombras en su contra.
Si Bautista no lo quiere ver ni mucho y menos reaccionar, pues allá él pues le seguirán colocando trampas y dispersando bulos para desprestigiarlo.
Está durmiendo con sus enemigos y lo seguirán trayendo a navajazo limpio.
Por cierto, la señora Leal Morales no es la única operadora de la cofradía carolista que trabajó con el apodado "Carón" -vaya cacofonía: los carolistas y los carones, Dios los hace y ellos se juntan- y el maestro Bautista también debería investigar a Lilia Christfield y René Buenrostro, quienes fueron directora de Servicios Jurídicos y contralor interno, respectivamente.
Saben de todas las triquiñuelas con el dinero legislativo igual que Domingo Bahena, el secretario general de la legislatura que en su momento obedeció lacayudamente a "El Carón", aunque a este señor al parecer Bautista ya le perdió le asco y hasta lo recontrató para el mismo cargo.
Claro, eso no significa que Bahena vaya a dejar de conspirar en su contra desde la oscuridad a pesar de que lo tenga durmiendo en el mismo catre.
*Envoyé depuis Paris, France.