Por Andrés Timoteo


LO QUE LA GENTE CUENTA


Dentro de tres semanas, el 31 de marzo, inician las campañas formales para los que buscarán la gubernatura y en el interfaz hay especulaciones o anticipaciones -que el lector las llame como guste- que se mastican en los merenderos políticos.

En el caso de la abanderada de Morena, la zacatecana Rocío Nahle, son las siguientes:


Que prescindiría del alcalde martinense Rodrigo Calderón pues como coordinador en la precampaña resultó un fiasco.

El rústico sujeto ni siquiera conoce el territorio estatal, ni los grupos y liderazgos regionales. Si lo sustituye acertará, si lo conserva se atendrá a las consecuencias.

¿Y quién para relevarlo?

Algunos dicen que será un enviado del altiplano donde cala la preocupación sobre los resultados de la precampaña y el estancamiento de la de Río Grande, Zacatecas, frente a su opositor, el peroteño José Yunes.

Otros mencionan al senador Ernesto Pérez Astorga quien se ha vuelto de las confianzas de José Luis Peña, el esposo de la zacatecana, el verdadero manejador del equipo.

Pero ni a cual irle.

El fidelista-duartista Pérez nunca ha ganado una elección en su vida y sabe de operación electoral lo mismo que nano-robótica. Nada.

El dueto Pérez-Peña no le resultó muy útil a la zacatecana durante su precampaña porque no le pudieron contener los dislates verbales y son los responsables de que se hicieran iónicas las vallas metálicas, los eventos en puras cabeceras municipales y las "camionetotas" blindadas.

Claro, no todo es pérdida pues si algo positivo hizo el cónyuge fue espantarle a todos los cuitlahuistas que se le querían controlar la campaña: Eleazar Guerrero, Zenyazen Escobar, Juan Gómez Cazarín, solo por citar al trío que se pregonaba como los manejadores del proyecto nahlista.

A varios los alejó con groserías. Dicen que a Guerrero Pérez, el primo del gobernante Cuitláhuac García, quien condicionó a la candidata el apoyo de su organización hechiza "Unidos Todos" a cambio de cederle casi todas las candidaturas a las diputaciones, lo repudió a sombrerazos.

Se cuenta que incluso Guerrero llegó a chantajear a Nahle con negarle recursos de la Secretaría de Finanzas a su campaña.

Entonces, luego de decirle al enviado que su organización debería llamarse "Robemos Todo", Peña lo mandó a "inflar burros por la corneta", como decía el extrañado Milo Vela.

BOXEO DE SOMBRAS

Por cierto, uno que todavía guarda esperanzas de que lo convoquen es el tuxtleco Juan Gómez.

En los últimos días ha usado sus redes sociales para dizque contestarle a los Yunes panistas por sus críticas al cuitlahuismo, Morena y a la zacatecana, además de insertar gacetillas en la prensa para que lo muestren como "el mejor guerrero" que tiene el partido guinda y Nahle para responderle a los azules. Risas.

Que es el 'warrior' bigotón y entrón que la zacatecana necesita. Ajá. ¿No da ternura tanta promoción artesanal?

Vaya, si un tipo como ese puede inspirar tan sensación.

El exgobernador Miguel Ángel Yunes ni lo fumó pues no hay nivel.

Los otros aludidos tampoco.

Gómez solo hace boxeo de sombras y no logra congraciarse con la candidata.

Habrá que recitarle el clásico de ¿a qué le tiras cuando sueñas mexicano?

Se dice que 'in extremis' podrían llamar al alcalde jalapeño Ricardo Ahued si no encuentran otros que pueda recomponer la campaña.

¿Adivinen el resultado de un 'topón' Ahueb-Peña?

El hidalguense tampoco es una lumbrera, pero algunos le conceden una fama aceptable y entonces lo presionarían para faltar su compromiso de no abandonar el ayuntamiento por cuestiones electorales.

Ya se verá.
Otro cambio que se rumora es en la vocería.

Al parecer la juchiteca Adriana Muñoz no aportó mucho en la precampaña y, en cambio, le acarreó desencuentros con los reporteros -sobre todo los de la zona conurbada – por su amagos de vengarse de ellos cuando llegue al gabinete.

Llegó a repartir advertencias a nombre de la candidata, aunque también es cierto es que a Muñoz la grillaron desde el interior de la estructura nahlista.

La versión es que la mandarán a vocerear la campaña senatorial de la jalapeña Claudia Tello.

Y el próximo vocero de la zacatecana, conjeturan, sería un recomendado de la directora de un periódico porteño, decano de la prensa.

Ella misma, la editora, estaría considerada para una diputación.

TAL"N DE AQUILES

Finalmente, los enterados aseguran que en el equipo nahlista buscan afanosamente un asesor externo para la estrategia de contención o reversión del concepto "zacatecana" que, consideran, le pesará mucho el día de la votación.

No es que los veracruzanos sean chovinistas sino que ha sido eficaz las percepción de que es una advenediza y desarraigada.

Es su 'Talón de Aquiles' aludiendo a la parte mortal del héroe troyano.

Nahle hace berrinche, patalea y reniega, cada vez que lee en la prensa que la llaman por su gentilicio.

De ahí la urgencia por desterrar la 'cruz de su parroquia' del imaginario jarocho.

Y hasta el momento no han encontrado al valiente que se aviente ese tiro que está más difícil que tejerle un abrigo al pulpo, a dos ganchillos y en punto de arroz.

¡Abur!

*Envoyé depuis Paris, France.