Por Andrés Timoteo
PARA QUE APRENDAN...
Ni por convicción ni por decoro personal, ya no se diga por la proyección y conveniencia política de cara a los comicios municipales, la comapeña Rosa Hernández votó en contra de proteger al exgobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, acusado de intentar violar a su media hermana y del cual se pedía su desafuero en la Cámara de Diputados.
Ella, que será la candidata de Morena a la alcaldía de Veracruz, fue una de las 104 diputadas que arroparon a Blanco con el piropo de "¡No estás solo!" y lo ayudaron a librarse de comparecer ante la justicia por el delito sexual cometido contra una mujer que era su consanguínea y a la que además violentaba física y verbalmente.
¡Fuera máscaras! El aviso palmario es para todas las mujeres porteñas golpeadas, denigradas, feminizadas, violentadas y abusadas sexualmente es: no cuenten con el apoyo de Hernández.
Mucho menos las feministas estén o no en algún colectivo porque en la comapeña siempre tendrán una enemiga jurada.
Insorora confesa, ella siempre se pondrá al lado de los varones agresores y en contra de las víctimas.
Ya lo hizo en San Lázaro el martes y lo hará si llega al ayuntamiento. Sin embargo, tampoco hay que decirse sorprendidos pues la de Comapa desde hace tiempo mostró su afinidad con los violentadores de mujeres.
No olviden que ella es madrina política del regidor porteño Sebastián Cano, acusado de violar a varias mujeres y quien no ha sido tocado por la justicia debido a que abogó por él ante el pasado gobierno cuitlahuista.
La impunidad de los violadores Cuauhtémoc Blanco y Sebastián Cano son las cartas de presentación de Rosa Hernández ante las mujeres jarochas.
Que ninguna lo olvide a la hora de estar en la casilla.
Que tampoco lo olviden las que serán sus contendientes a la hora de los debates.
Frente al comportamiento de ella y usando la frase del caudillo tabasqueño hay que burlarse un poco del mujerío porteño e iluso que algún día le creyó sus mentiras y que la apoya: ¡Tengan para que aprendan!
De las legisladoras guidas de Veracruz que olvidaron la sororidad para blindar al violador de Morelos están las cuitlahuistas Margarita Corro, Miriam Ferráez, Jessica Ramírez, Elizabeth Cervantes y Corina Villegas.
¿Las jarochas les exigirán cuentas por su falta de sororidad o harán como que nada pasó en la sesión parlamentaria del martes?
Para esas otras burladas va también la frase que está muy de moda en estos tiempos: ¡Disfruten lo votado!
Tenían razón las feministas que el 8 de marzo le gritaron a la presidenta Claudia Sheinbaum que con ella no llegaron todas.
Ahora se sabe que los que llegaron con ella a palacio nacional fueron tipejos como Cuauhtémoc Blanco.
Ah y también la priista Lorena Piñón alzó la mano para proteger a Blanco aunque nada se le puede reclamar porque nadie votó por ella, es plurinominal, y solo representa a los intereses de su jefe, Alejandro Moreno, el dirigente nacional del PRI. Aún así, la señora Piñón siendo mujer traicionó a sus congéneres.
De los varones veracruzanos en San Lázaro que sufragaron para no desaforar al exgobernador morelense nada extraña, sobre todo de personajes como Javier Herrera, Zenyazen Escobar y Roberto Ramos que a nivel local tienen señalamientos de violentar a mujeres. Ellos votaron para cobijar a un semejante, pues.
GASERO CHAFA
No han pasado si quiera cuatro meses de que llegó al cargo y ya protagonizó su primera pifia que fue llevar gas adulterado a las plantas generadoras del fluido eléctrico de la CFE en el sur del país lo que provocó un mega-apagón el lunes pasado en Campeche, Quintana Roo y Yucatán.
El exgobernante Cuitláhuac García -de la misma catadura que Cuauhtémoc Blanco por su corrupción y su violencia contra las mujeres, aunque el jalapeño no las abusaba sexualmente pero sí las criminalizaba e ignoraba, sobre todo a las víctimas- es un gasero chafa porque no vende buen producto.
Según la propia CFE, el gas natural que le suministraron bajo la supervisión del Centro Nacional de Control del Gas Natural (Cenagas) tenía "un alto índice de humedad" que afectó las plantas de ciclo combinado en la Central Nuevo Pemex, en Tabasco, y eso detuvo su funcionamiento. De ahí el 'apagón' en la península yucateca que duró varias horas.
La CFE tuvo que recurrir a proveedores privados para obtener el carburante adecuado -las empresas que refinan por su cuenta el gas-. García Jiménez es malo para gobernar, malo para hilar ideas, peor para expresarlas y ahora pésimo como vendedor de gas.
En su descarga hay que decir que al tipo no le ocupa ni le preocupa.
Es más, no hace nada en el Cenegas y la prueba es que tiene tiempo de sobra para lucirse como guitarrista amateur -también chafa- y derrochar frivolidad hortera.
Por ejemplo, el 13 de marzo fue a "inspeccionar" -ajá- los gasoductos de Nuevo León y se quejó en las redes sociales de que no le dio tiempo para comerse un cabrito asado.
Y en las mismas redes se lo merendaron con alusiones a su desastrosa gestión en Veracruz y hasta groserías sobre a su vida personal. Otra vez:
¡Tengan para que aprendan! -esta vez dedicado a los clientes del Cenagas-. Risas.
*Envoyé depuis Paris, France.
