Por Andrés Timoteo

PLEITO DE HERMANOS

En algunos municipios veracruzanos hay historias dignas de "La Ley de Herodes", la película de Luis Estrada, donde los ediles son señores feudales que mandan a punta de horca y cuchillo, y, por supuesto, no están dispuestos a dejar las alcaldías en manos de otros que no sean sus parientes.

Uno de estos casos es Ayahualulco donde los hermanos Morales Rosas llevan años turnándose la presidencia municipal y quieren otros cuatro más a partir del 2026.

Actualmente gobierna José Arturo Morales Rosas quien heredó la alcaldía a su hermano Filiberto de los mismos apellidos, y antes fue munícipe su otro hermano Abundio.

Ellos son priistas, muy allegados a los Yunes Zorrilla de Perote, y ya velan armas para defender el coto municipal en la disputa del 2025.

La candidata será, de acuerdo a lo que se cuenta, Maura Morales Rosas, la hermana quien ahora preside el DIF municipal y usa los programas y obras públicos en su precampaña.

Lo malo es que lo electoral traerá un cisma en el clan Morales porque Abundio quiere repetir bajo el argumento de que él inició la saga de hermanos gobernantes y además de que por ser hombre tiene más derecho que Maura.

Así como oyen, en Ayahualulco no vale el empoderamiento de las féminas ni la paridad de género ni eso de que con Claudia Sheinbaum y Rocío Nahle "llegaron todas".

Abundio Morales amenazó a sus hermanos con irse a Morena si no le permiten la candidatura.

"A ver si una vieja me gana", alardea en las cantinas según los lugareños. Nadie dude que los guindas están esperando con los brazos abiertos porque cumple los requisitos para ser su candidato: es priista, corrupto, misógino, tramposo, violento y fanfarrón.

Eso que ni qué.

En junio posado y aún con ayuda del aparato municipal que maneja su hermano, Abundio perdió la diputación federal por Coatepec frente al morenista Adrián González y eso también contribuyó a la fractura familiar porque se queja que "no le dieron suficiente dinero" para comprar los votos que necesitaba. Ahora quiere la alcaldía como premio de consolación.

Vaya y una pista de cómo se manejan las cosas en Ayahualulco, ¿adivinen el nombre del mercado municipal?

¡Hermanos Morales!

Para que nadie olvide quiénes son los dueños del pueblo y ¡ay de aquellos que critiquen o se opongan a esos 'títulos de propiedad' porque suelen terminar detenidos o baleados!

¿NO QUE NO?

Pregonan que en Veracruz no vale el pacto del altiplano entre el lopezobradorismo y la familia Yunes Márquez-Linares.

La zacatecana Rocío Nahle anticipa, amaga, grita, pregona y convoca a no darles espacio en lo local y eso lo repiten sus corifeos.

Sin embargo, sobre ella y ellos están los acuerdos que hizo el expresidente Andrés López Obrador con los aún panistas, pero casi morenistas.

Ayer, el juez federal Oscar Lozada del distrito de Jalapa canceló la orden de aprehensión en contra del exalcalde boqueño y senador Miguel Yunes Márquez mientras que la Fiscalía General de la República (FGR) anuló su búsqueda internacional.

Es decir, ya se cayó el expediente que le armaron desde tiempos de Patrocino Cisneros, quien fue el verdadero fiscal de la entidad en los últimos cinco años.

Cierto, la fiscala 'encargada de despacho', Verónica Hernández, puede impugnar la decisión judicial y llevarla a un tribunal colegiado y luego pedir que sea la misma Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) la que dicte el punto final, pero no lo va a hacer.

No porque ya está muy desgastada y porque no obedece a la zacatecana Nahle. Un proceso de impugnación ya no beneficia en nada a Cisneros, su jefe, y además se caerá porque la orden de cancelar la persecución judicial contra el legislador forma parte del pacto con el obradorismo.

Aun si Nahle se encapricha y quiere pelear esa batalla, saldrá derrotada además que no se le ve desobedeciendo a su jefe político.

Entonces, es tiempo de que el nahlismo recoja las varas y apechugue.

O como dicta la norma no escrita de la política: se trague ese sapo sin hacer gestos.

Los Yunes ya están con un pie en Morena, el senador se sienta en la bancada guinda y es apapachado por Adán Augusto López, el líder de la fracción guinda y personero del expresidente.

Por eso, en las semanas venideras se daría su acomodo en algún partido satélite del régimen, dicen que tal vez el Partido del Trabajo, pero puede ser en el mismo Morena donde eso del 'derecho de admisión' solo es baladronada aldeana.

Aguanten 'vara', les diría el 'pueblo bueno' a Nahle y a sus repetidores de discurso.

Por lo pronto, al motejado 'Chiquiyunes' ya lo rebautizó el periodista sureño Mussio Cárdenas como 'ChiquiChairo" y las faenas electorales que le permitirán realizar en Veracruz para el 2025 serán una mezcolanza cromática extraña.

Según la Filosofía del Color sí se mezcla el marrón con el azul dará un azul grisáceo o marrón difuminado, o sea algo así como 'magenta a medios chiles' o un guinda aguado para que lo entienda el populacho.

Es lo que se verá en la conurbación Veracruz-Boca del Río, el único bastión que al yunismo le permitirían conservar según el pacto hecho con el que ahora despacha desde Palenque, Chiapas.

*Envoyé depuis Paris, France.