Por Andrés Timoteo
TIERRA NOCTURNA
Perote es tierra nocturna tal como aquel pueblo en Alaska que es el escenario de la cuarta temporada de la serie True Detective titulada así precisamente: tierra nocturna.
La protagoniza, en su papel de jefa de la policía municipal, la actriz Jodi Foster quien se hizo famosa con la película "El silencio de los inocentes" de 1991.
Sin maquillaje ni poses de diva, una madura Foster investiga y desentraña el misterioso asesinato de seis científicos 'wokes' que en un centro de investigación en el Ártico realizan estudios de supuesto corte ecológico, pero que en realidad están financiados por una empresa minera.
Este consorcio contamina la región, especialmente los mantos acuíferos, lo que provoca envenenamiento de los lugareños y la muerte de bebés.
Sin embargo, los científicos seudo-ecologistas emiten reportes mentirosos minimizando el daño ambiental.
Trasladando la trama a lo local, la transnacional Granjas Carroll hace lo mismo en la región de Perote con sus criaderos de cerdos que han provocado una larga noche contaminante y asesina.
Los daños al medio ambiente y a la salud de los pobladores son evidentes desde hace dos décadas.
Ahí fue la cuna de la pandemia de Gripe Porcina en el 2009 y a lo largo de los años se han reportado muertes de recién nacidos a causa de la polución.
Esto sumando al hedor que invade los poblados.
Como en la serie True Detective, la poderosa empresa tiene compradas a las autoridades locales y estatales que le permiten seguir cometiendo crímenes ecológicos y humanitarios.
El ejemplo más reciente de la protección oficial se dio en junio pasado cuando la policía estatal reprimió una protesta de lugareños contra esos criaderos de marranos.
Los agentes ejecutaron extrajudicialmente a los hermanos Jorge y Alberto Cortina, un crimen de lesa humanidad que sigue sin castigo.
La Fiscalía lo catalogó como "homicidio doloso en riña" o sea que las víctimas no fueron atacadas por los policías sino perdieron la vida en un pleito entre particulares y, por ende, son responsables de sus propias muertes.
Granjas Carroll no fue molestada, hubo aspavientos de una clausura, pero solo uno de sus 51 criaderos tiene un 'proceso' abierto -o sea llevan seis meses investigándolo- y sigue operando.
La versión es que el gobierno cuitlahuista no la pudo clausurar definitivamente porque los directivos de la transnacional amenazaron con hacer público el 'moche' por más de 5 millones de pesos que le pagaron al entonces procurador del medio ambiente, Sergio Rodríguez Cortés.
La marranera también metió en un brete a los funcionarios estatales en sus últimas comparecencias ante el congreso local pues ni siquiera se pusieron de acuerdo para mentir sobre el enjuague.
Un secretario dijo que la transnacional estaba emplazada para retirarse de Perote y otro lo desdijo.
Luego obligaron al último para culpar a la prensa de tergiversar sus dichos -lo de siempre- y recular diciendo que la empresa sí tiene un ultimátum.
Pero todo es puro salivazo.
GACETILLAS Y MALETAS
La porquera siguió operando en el cuitlahuato y lo hará en el nahlato. Es más, ya mueve los engranes para eso.
Ahora mismo paga gacetillas en la prensa, siempre lo hace, aunque ahora con mensajes dirigidos a la zacatecana Rocío Nahle.
Con sus escribientes opinadores le mandan a decir: "Granjas Carroll: un pilar económico que no debe tambalear.
En medio de las polémicas que rodean a los funcionarios salientes de la administración estatal, una cosa es clara: Granjas Carroll de México continúa siendo un motor económico esencial para la región del valle de Perote".
"Insistir en su salida sería no solo un grave error, sino un golpe directo a casi tres mil familias que dependen directamente de esta empresa porcícola. Granjas Carroll es el sustento de toda una comunidad. Representa una luz que no debe apagarse".
Traducción: Nahle será la culpable si esa "luz" se apaga. Amagan a Nahle con atribuirle el supuesto colapso económico de la región para que les permita seguir contaminando.
Claro, en las gacetillas esconden el robo de agua, las toxicas lagunas de oxidación, el tiradero de marranos muertos, la pestilencia y la suciedad en aire, tierra y veneros.
Ahora mismo corre la versión de que personeros de la empresa ya entablaron contacto con el nuevo procurador ambiental, el tamaulipeco Ángel Carrizales, y como le saben su debilidad pues lo buscarán con sendos maletines de dinero para convencerlo de que la marranera solo trae bonanza.
Los directivos calibran que entre Carrizales y Rodríguez Cortés así como entre Nahle y García Jiménez no hay muchas diferencias ni demasiadas dificultades para convencerlos con gacetillas y maletas de billetes.
En fin, vean la cuarta temporada de True Detective porque además de su dosis de misterio paranormal, el desenlace tiene que ver con la justicia por mano propia de los pobladores -mujeres principalmente- contra el consorcio contaminante.
El remedio contra los cochineros siempre es Fuente Ovejuna, diría Lope de Vega.
Por cierto, hoy es Día Mundial del Suelo y el de Perote, Jalacingo, Villa Aldama y Altotonga está emporcado por Granjas Carroll.
*Envoyé depuis Paris, France.
