NI PA’CUANDO
* Solo camiones urbanos del Acabus, a cargo de Gobierno del Estado, y algunos taxis colectivos son los que dan el servicio, lo que es insuficiente
ACAPULCO, MÉXICO.- Por segundo día consecutivo los transportistas de Acapulco suspendieron este servicio a los usuarios debido a que siguen las amenazas en su contra por parte del crimen organizado.
Desde la mañana de este viernes, la gente se apostó en las paradas para esperar de manera infructuosa la llegada de las unidades de transporte público.
Solo los camiones urbanos del Acabus, que está a cargo del Gobierno del Estado, y algunos taxis colectivos son los que están dando el servicio, lo que resulta insuficiente.
Las personas que tienen que llegar a su trabajo tuvieron que caminar a pie largas distancias a falta de transporte.
En tanto, las autoridades de la Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro) ordenaron la suspensión de clases en las preparatorias y facultades ubicadas en distintos puntos de Acapulco para no poner en riesgo la integridad de los alumnos.
En tanto, Alejandro Martínez Sidney, dirigente de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios Turísticos (Canaco-Servitur) informó que en la mayoría de las escuelas de Educación Básica y de nivel Medio Superior y Superior se suspendieron clases por la falta de transporte.
Asimismo, señaló pérdidas económicas por más 80 millones de pesos.
"En Acapulco es un caos porque ya son dos días sin transporte y las pérdidas económicas hasta el momento son de 87 millones de pesos al comercio organizado", dijo Alejandro Martínez.
"La movilidad de la ciudad fue afectada considerablemente directamente a los trabajadores, micro, medianos empresarios y también a los consorcios y franquicias nacionales", señaló el empresario.
Indicó que Acapulco ya está en la ruta de la recuperación tras el huracán "Otis", pero ahora "grupos organizados que no tienen conciencia cometen actos delictivos a plena luz del día y amenazando a la población", indicó.
Según el dirigente de la Canaco-Servitur, estos grupos delictivos no han dejado de extorsionar a los comercios y empresas.