POR “ALBERTO”

* Las personas coincidieron en estar felices, luego de mucho tiempo de sequía

TAMPICO.— El agua en abundancia que ha dejado Alberto en Tamaulipas no sólo comenzó a regresarle la vida a la mayoría de los ríos de la entidad, sino que se ha convertido en un motivo de alegría para la población en general, pero principalmente para quienes radican en el campo.

En la principal zona citrícola los productores están felices por el crecimiento de los ríos Corona y Purificación, que atraviesan a comunidades de varios municipios hasta desembocar en la presa Vicente Guerrero.

En el puente del río Purificación, que se ubica en el kilómetro 38 de la carretera de Ciudad Victoria a Monterrey, arribaron cientos de personas de las comunidades cercanas, para presenciar el momento exacto en que llegaba la creciente.

Muchos jóvenes llegaron en bicicletas o en motocicletas, algunas personas a pie, y hasta familias enteras en camionetas.

“Los tiempos de Dios son perfectos, ahora sólo nos queda agradecer por esta enorme bendición, no cabe duda de que cuando Dios da lo hace a manos llenas”, expresó Ámbar Uresti, habitante del poblado El Carmen.

Las personas coincidieron en estar felices, luego de mucho tiempo de sequía. Incluso una señora emocionada no pudo contener el llanto, “le hemos pedido tanto a Dios, toda la región necesita agua para producir”.

Un productor de naranja aseguró que ya estaban desesperados, pero que con las lluvias y el agua en los ríos se llenarán los mantos acuíferos, “porque esta región siempre ha sido muy verde y bondadosa, pero esta sequía nos estaba matando poco a poco”.

El señor Rodolfo de León, quien es piscador de naranja, llegó acompañado del niño Gerardo Espinoza, “es la primera vez que el niño ve una creciente. Yo siento mucha alegría, estamos felices todos porque el agua nos beneficia en todo en esta región donde vivimos de la producción de naranja, limón y toronjas”, comentó.
Emocionado, destacó que, “con la lluvia las huertas se fortalecerán, habrá buenas cosechas y todos tendremos trabajo, nosotros los piscadores, los productores y hasta camioneros y todos los que vivimos de la fruta”.