CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- La Facultad de Medicina de la UNAM tiene por primera vez una directora: se trata de la doctora Ana Carolina Sepúlveda Vildósola, quien se convirtió en la primera mujer en asumir el cargo para el período 2024-2028.


Hoy, a través de sus redes sociales, la UNAM comunicó la designación. En su cuenta de X, la máxima casa de estudios, publicó:

“Un Goya para la doctora Ana Carolina Sepúlveda Vildósola por haber sido designada como la primera mujer en dirigir la Facultad de Medicina de la UNAM. Lo hará durante el período 2024-2028”.

Nacida en la Ciudad de México, es egresada de la misma facultad de Medicina que ahora dirigirá y fue en la propia UNAM donde realizó su maestría y doctorado, este último en ciencias con campo de estudio en Educación Médica.

Es especialista en pediatría en el IMSS y forma parte del Consejo Mexicano de Pediatría.

Actualmente es profesora Titular C de tiempo completo en la Facultad de Medicina de la UNAM.

Poseedora de un extenso currículum en el ámbito médico institucional, fue presidenta del Consejo Directivo de Fundacio´n IMSS, AC.; Tesorera de la Academia Nacional de Medicina de México; miembro del comite´ directivo del Consejo Mexicano para la Acreditacio´n de la Educacio´n Me´dica (COMAEM); vocal del comité de planeacio´n de la Asociacio´n Mexicana de Escuelas y Facultades de Medicina (AMFEM); miembro del Consejo Promotor de Competitividad y Universalidad en Salud de FUNSALUD.

Además, fue editora en Jefe de Gaceta Me´dica de Me´xico; vocal titular del Comite´ Consultivo Nacional de Normalizacio´n de Salud Pu´blica de la Secretari´a de Salud; miembro del International Association for Health Professions Education (AMEE) y cuenta con reconocimiento Nivel I del sistema nacional de investigadoras e Investigadores de CONAHCYT, con 21 años de experiencia en cargos directivos del sector.

La Facultad de Medicina es una de las instituciones de enseñanza más prestigiosas de la UNAM y del país, cuya historia se remonta a la época colonial, pues fue en 1551 cuando el rey Carlos I de España, instruyó el inicio de la enseñanza médica en la Real y Pontifica Universidad de México.

En los siglos siguientes fue desarrollándose una profunda tradición académica que se formalizó en 1833 y encontría cauce en la autonomía universitaria de 1929.

Desde entonces, la escuela, elevada a facultad en 1960, jamás había tenido a una mujer en su directorio que, por lo demás, ha sido semillero de rectores y epicentro de un grupo político transexenalmente influyente en la máxima casa de estudios.