(apro).- La compañía de productos de belleza, ALF Beauty cerró repentinamente sus sucursales, sin avisar, lo que dejó a sus clientes y empleados en el abandono.

La empresa ofrecía tratamientos faciales, corporales y capilares en Ciudad de México, Estado de México, Tijuana y Zapopan.

En redes sociales, clientes y empleados denunciaron la falta de un aviso apropiado sobre el cierre, la retención de sueldos y liquidaciones, además de que no completaron los tratamientos, no responden a mensajes ni llamadas y han limitado los comentarios en sus redes sociales.

Por ahora, los clientes –a quienes la empresa les debe tratamientos– han comenzado a organizarse para presentar las demandas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

Por su parte, la empresa Body Brite, que concesionó sus servicios de depilación a Alf Beauty, se pronunció en un comunicado en sus redes sociales, en el que lamentó el “perjuicio irreparable que ha generado” y calificó de “traición” las acciones de la extinta empresa.

“Ante tal circunstancia ajena a BodyBrite, y con la finalidad de no abandonar a los clientes como lo hizo la empresa señalada, en la medida de las posibilidades de la marca, recibiremos con las mayores concesiones posibles a todos aquellos clientes afectados por Alf Beauty, para culmiar su tratamiento”, se propusó en la publicación.
“Lo anterior se hace necesario por el engaño por parte de Alf Beauty a sus clientes, a la marca y a sus trabajadores, quienes están siendo despedidos deliberadamente”, denunció Body Brite.