A SU LLEGADA A LA CORTE

CIUDAD DE MÉXICO (Agencias).- Algunos trabajadores adscritos a la ponencia de la ministra Lenia Batres Guadarrama buscan nuevas opciones de empleo ante el temor de perder sus prestaciones extraordinarias.

Aunque la ministra Batres fue adscrita a la Segunda Sala de la Corte para ocupar el lugar que dejó Loretta Ortiz, quien pidió su cambio a la Primera Sala, la nueva integrante del Pleno llegó a la ponencia que abruptamente dejó Arturo Zaldívar en noviembre pasado.


En esa ponencia se quedaron los secretarios de Estudio y Cuenta, así como personal administrativo, que son quienes recibieron a Batres.

A su llegada, la ministra no sólo solicitó a la Corte reducirle su propio salario para no ganar más que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, también pidió no recibir las prestaciones extraordinarias previstas para los ministros, y ser inscrita en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) para recibir servicios médicos públicos y no privados.

Proceso informó que la Corte respondió a la ministra que si es su deseo, debe renunciar por escrito a las prestaciones extraordinarias; que no puede inscribirla en el ISSSTE, porque constitucionalmente sólo tiene derecho a un haber de retiro, no a cotizar en el instituto porque, de hacerlo, en el futuro recibiría una pensión que configuraría un doble pago indebido, y que no puede reducirle el salario porque, además de existir prohibición constitucional, las reglas para topar el salario de los servidores públicos están suspendidas.

La ministra dio a conocer que renunciaría a sus prestaciones, que se inscribiría al ISSSTE de manera voluntaria y que regresará el excedente de su salario a la Tesorería de la Federación (Tesofe).

En seguimiento al discurso de austeridad, la ministra informó a los secretarios de su ponencia, que estaban con el ahora ministro en retiro Arturo Zaldívar, que si es su deseo quedarse con ella, debían renunciar a sus prestaciones extraordinarias y ajustar sus salarios para no ganar más que el titular del Ejecutivo federal.

Esta casa editorial confirmó que, ante el riesgo de perder sus prestaciones extraordinarias, mismas que se establecen cada año en el Manual de Remuneraciones del Poder Judicial de la Federación (PJF), diversos secretarios de la ponencia de Batres han buscado sus cambios de adscripción a las oficinas de otros ministros.

Ello, bajo el argumento de que no quieren perder sus trabajos y de que, de no encontrar solución pronta, tendrán que renunciar a sus plazas en el PJF, pues los puestos que ocupan son de confianza y los ministros tienen vía libre para disponer de ellas para conformar sus equipos.