CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Rubén Choreño Morales, líder disidente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, fue reportado con diversas lesiones tras ser víctima de una golpiza a las afueras del edificio sindical.
El líder sindical recibió una golpiza en la trifulca del 26 de septiembre a las afueras de la sede sindical ubicada en Zaragoza 15, colonia Guerrero en la Ciudad de México.
Se le reportó como “policontundido”, es decir, presenta múltiples contusiones producto de la golpiza que le propinaron.
Choreño responsabilizó de los daños a su persona y a sus compañeros, al priista Ricardo Aldana a quien calificó como “el verdadero delincuente que roba las arcas de la empresa Pemex”.
“Hago responsable de todos los daños y causas que afecten a mi persona, a mis compañeros petroleros y todos los que nos representan en este movimiento de justicia y patriotismo a Ricardo Alana”, dijo en un mensaje de X.
En una fotografía que acompaña la publicación se observa al líder en una camilla, con un ojo hinchado y morado y la cabeza vendada.
Previo a la agresión, Choreño declaró en entrevista con Jorge Tinajero, que contaban con una “ejecutoria a favor de la sentencia del Octavo Tribunal Federal de Materia Laboral”.
La mañana del jueves, un grupo de presuntos trabajadores de Petróleos Mexicanos (Pemex) dieron un “portazo” en el Sindicato Nacional de trabajadores de la empresa paraestatal, derivado de las tensiones por la elección del nuevo líder de esa organización.
Rubén Choreño Morales y un grupo de personas afines, se presentaron en las instalaciones del sindicato, con el objetivo de tomar su liderazgo.
Según Choreño, él resultó electo en la asamblea extraordinaria para ocupar la dirigencia del Comité Ejecutivo.