CIUDAD DE MÉXICO (apro).- A diferencia de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo pretende encargar el presupuesto multimillonario destinado al desarrollo de las futuras redes de ferrocarril a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), y ya no a la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa): para 2025, su equipo contempla asignar a la dependencia civil un presupuesto de 92 mil 134 millones de pesos para “ferrocarriles eficientes y competitivos”.

El pasado 13 de octubre, Sheinbaum aseveró que la SICT “coordinaría” las obras del tren México-Querétaro, y que los militares integrantes del agrupamiento de Ingenieros Felipe Ángeles estarían a cargo de la construcción del tren.

A nivel operativo, esta asignación de tareas se reflejará en que la SICT, dirigida por Jesús Antonio Esteva Medina, tendrá el control de los recursos, según el proyecto de presupuesto 2025, que Rogelio Ramírez de la O, el secretario de Hacienda, entregó esta semana a la Cámara de Diputados.

La diferencia no es menor: en 2024, el gobierno de López Obrador había entregado 127 mil millones de pesos a Defensa –antes conocida como Sedena– para la realización de obras públicas, principalmente el Tren Maya.

Para 2025, el equipo de Sheinbaum contempla entregarle 40 mil millones de pesos, para terminar la construcción del megaproyecto, pero no plantea una asignación de recursos para los nuevos trenes, anunciados por Sheinbaum durante su campaña.

A consecuencia de este cambio de asignación, el presupuesto de la SICT tuvo un incremento brutal –de 85 mil millones de pesos en 2024 a 140 mil millones de pesos en 2025--, mientras que el de Defensa se reduciría en 107 mil millones de pesos.

El proyecto de presupuesto del gobierno de Sheinbaum también contempla un recorte drástico a los recursos asignados al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), que pasarían de mil 500 millones de pesos en 2024 a 924 millones de pesos en 2025 –es decir, un 39% menos–, y al de la rama de negocios del Ejército, pues su empresa Grupo Aeroportuario, Ferroviario, de Servicios Auxiliares y Conexos Olmeca-Maya-Mexica, S.A. de C.V. pasaría de tener 15 mil millones de pesos en 2024 a 2 mil 255 millones de pesos el próximo año.

El equipo de Sheinbaum planteó un recorte en prácticamente todas las áreas de Defensa, con escasas excepciones, como un incremento de 2 mil millones de pesos a las “provisiones para la construcción de infraestructura militar”, a cargo de la dirección general de Ingenieros Militares, una de las ramas del Ejército más favorecidas por el gobierno de López Obrador.