* Por hostigamiento y violencia de género
AVC/Verónica Huerta
XALAPA, Ver.- La académica de la facultad de Filosofía de la Universidad Veracruzana (UV) Remedios Álvarez Santos exigió a las autoridades de la Máxima Casa de Estudios y a la Fiscalía General del Estado que continúen la investigaciones en contra de los cinco maestros y dos estudiantes que ejercieron hostigamiento laboral, y violencia de género en modalidad psicológica en su contra desde el año 2017.
Dijo que la Contraloría General de la Universidad Veracruzana “archivó” la denuncia de hostigamiento y violencia laboral en contra de tres profesores y dos profesoras, tras haber denunciado estos actos en el año 2017.
Acusó dilación por parte de autoridades de la FGE que tras haber podido judicializar la Carpeta de Investigación en contra de los profesores denunciados, no se han registrado avances; debido a que han cambiado en ocho ocasiones a los Fiscales.
“Cambian a los Fiscales, llega uno nuevo y tenemos que empezar todo desde cero”.
Refirió que la Coordinadora de la FGE la convocó para que después de cinco años de haber interpuesto la denuncia le pidió que llegara a una conciliación con los agresores.
“Me negué y logramos la judicialización de la Carpeta y se pudo porque puse una denuncia ante la CEDH por la dilación de la FGE; y ahí una juez exhortó a la FGE que repararán la Carpeta y para mi sorpresa el Juez Rene Ortiz, no judicializa la Carpeta”
Señaló que en una audiencia con el Juez del Poder Judicial de Veracruz, René Ortiz Sartorius no vinculó a proceso a lo cinco agresores denunciados por el presunto delito de violencia de género, porque en la Carpeta de Investigación señala a dos profesoras de la UV.
“Los argumentos del juez es que entre las personas que me agredieron hay dos mujeres entonces no puede ser violencia de género con modalidad de violencia psicológica, él juez dijo: Hay dos mujeres entonces no puede ser violencia de género”, dijo la víctima.
Remedios Álvarez detalló que la Comisión de Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitieron cada una recomendaciones a la Universidad Veracruzana, pero no lo hicieron en contra de los académicos de Filosofía señalados como agresores y agresoras.
“Y sobre la determinación de la CEDH el juez se basó y dijo que entre las dos personas que me agredieron hay dos mujeres y entonces no quiso; entonces no sabemos si hay ignorancia y vamos a ver qué sigue; está detenida la Carpeta y no hay Juez que siga el caso”, finalizó.
Por mencionar, en el año 2017, Álvarez Santos participó en un examen de concurso para obtener una plaza laboral en la Facultad de Filosofía, localizada en la Unidad de Humanidades de la Universidad Veracruzana (UV), en Xalapa.
Trascendió entre la comunidad académica que este espacio laboral obtenido por Álvarez Santos, no fue del agrado del director, Félix Aude Sánchez, que buscaba adquirir una plaza presuntamente para su esposa.
A partir de entonces Álvarez Santos comenzó a padecer las conductas hostiles en su contra, ejercidas por Aude Sánchez y otros profesores amigos del director, en el que incluso fue denostada con el uso de las redes sociales.
Álvarez Santos denunció el acoso ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en el año 2017, y este organismo inició la investigación CEDH/2VG/DAM/1081/2017 para la
Universidad Veracruzana.
La recomendación solicitó a la rectora de la UV, que interviniera contra el hostigamiento laboral que la académica denunciaba, diera capacitación en derechos humanos a los maestros y maestras de la Facultad de Filosofía, así como prevenir que Álvarez Santos no sea una vez más violentada en sus garantías individuales, ni se revictimizara.
En agosto del 2019, la CEDH emitió la recomendación 50/2019 a la UV, misma que fue aceptada por Sara Ladrón de Guevara el 13 de septiembre, y el 05 de octubre ofreció la disculpa pública.
De esta manera la exrectora de la UV, Sara Ladrón de Guevara González, ofreció una disculpa pública a la académica Remedios Alvarez Santos, tras haber sido víctima de acoso y conductas hostiles, y reconoció que entre la comunidad universitaria hay más casos similares.