* Claudia Sheibaum a los Yunes

* “La historia se lo va a reconocer”

Por Noemí Valdez
Reportera de NOTIVER

La Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, rechazó presiones o amenazas para que el senador panista Miguel Ángel Yunes Márquez votara a favor de la Reforma Judicial y aseveró que la "historia se lo va reconocer".

Al respecto, dijo que no hubo presiones al panista y se negó a opinar sobre las posturas en contra que sus compañeros han fijado.

"No, que yo sepa no. Bueno, pues eso es lo que piensan ellos. Yo creo que él tomó una buena decisión y la historia se lo va a reconocer. Pues es una decisión que él toma y además informada, porque hace un posicionamiento muy claro, muy, muy claro de por qué la está apoyando", expresó.

Claudia Sheinbaum señaló que la Oposición está en su derecho de movilizarse tras la aprobación de la reforma, pero -recalcó la morenista- es un "mandato popular".

“Hay protestas pues es... ahora eso de que era el pueblo protestando, pues es un decir, ¿no?, porque fueron... y además de una manera muy... la manera en que irrumpieron pues ahí en el Congreso, pues no fue pacífica que digamos".

La noche de este martes, el senador panista Miguel Ángel Yunes Márquez decidió respaldar la reforma judicial promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, con lo que Morena tuvo los votos necesarios para aprobarla.

El legislador, quien reapareció tras pedir licencia por temas de salud, aseguró desde la antigua sede de la Cámara alta que ‘México no se va a destruir si se aprueba” la reforma que establece la elección de jueces y magistrados por voto directo.

Argumentó que la reforma no es la mejor, pero que con las leyes secundarias habrá oportunidad de perfeccionarla.

“En la decisión más difícil de mi vida he decidido dar mi voto a favor para perfeccionar el sistema de justicia”, sostuvo.

A Morena y aliados le hacía falta un voto para tener la mayoría calificada y aprobar una polémica reforma que ha sido cuestionada por parte de trabajadores y jueces del Poder Judicial, organizaciones empresariales, centros de análisis y diplomáticos de Estados Unidos y Canadá.

Entre los principales argumentos se encuentran el que se vulnerará la independencia de juzgadores.