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¡IM-PA-GA-BLES! - PURAS PÉRDIDAS

La imposición de un arancel del 25% a los automóviles fabricados fuera de Estados Unidos representa una amenaza directa para la industria automotriz de la región. Así alertaron cámaras empresariales quienes consideraron que esta medida...

¡IM-PA-GA-BLES! - PURAS PÉRDIDAS

* Subirán los costos de los autos
* Por los aranceles de Trump
* A cuidar las charchinas

Por Noemí Valdez
Reportera de NOTIVER

La imposición de un arancel del 25% a los automóviles fabricados fuera de Estados Unidos representa una amenaza directa para la industria automotriz de la región.

Así alertaron cámaras empresariales quienes consideraron que esta medida proteccionista encarece los vehículos, reduce la competitividad y pone en riesgo miles de empleos en la región.

De acuerdo a datos, México es el principal proveedor de autos al mercado estadounidense y forma parte de una cadena de suministro altamente integrada.

Según datos del INEGI, en 2024 México exportó cerca de 3.5 millones de vehículos ligeros, de los cuales el 80% se dirigieron a EE.UU.

La imposición de estos gravámenes no solo impactará a las exportaciones nacionales, sino que también incrementará los costos para los consumidores en Estados Unidos, lo que podría traducirse en una menor demanda y afectar la estabilidad del sector.

La incertidumbre generada daña la confianza de los inversionistas y obstaculiza el crecimiento económico de ambos países.

La Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) consideró que el Gobierno de México debe actuar con determinación para defender los intereses nacionales.

“Es imprescindible exigir el cumplimiento de los compromisos adquiridos en el marco del T-MEC y buscar mecanismos para contrarrestar las afectaciones derivadas de estos aranceles. No podemos depender de la voluntad de un solo país para garantizar el crecimiento de nuestra economía”.

Los empresarios señalaron que la industria automotriz es un pilar fundamental de la economía mexicana y su competitividad no puede verse afectada por decisiones arbitrarias.

Ante este panorama, se requiere una estrategia clara que brinde certidumbre a las empresas y garantice condiciones de competencia justa.

El fortalecimiento de la inversión, la innovación y la promoción de nuevas oportunidades comerciales deben ser prioridad en la agenda económica del país.

“Reiteramos nuestro compromiso con la defensa de las empresas establecidas en México y con la búsqueda de soluciones que protejan el desarrollo del sector productivo. Es momento de reforzar el diálogo con nuestros socios comerciales, explorar nuevas alianzas y exigir un marco de reglas claras que impida la imposición de medidas que distorsionen el comercio”.