XALAPA,Ver. (De la corresponsalía).- Investigadores de la Universidad Veracruzana trabajan en conocer el impacto de los videojuegos que son considerados como un pasatiempo, sin embargo, por aspectos lúdicos e inmersivos en ciertos casos puede ocasionar trastornos de comportamiento y afectar las relaciones escolares, de trabajo, familia o salud.
Lo anterior lo señaló León Felipe Beltrán Guerra, investigador adscrito al Instituto de Investigaciones Psicológicas (IIP) de la máxima casa de estudios quien, junto con los también investigadores de la misma entidad académica, Jorge Luis Arellanez Hernández y Enrique Romero Pedraza, trabaja en el desarrollo del proyecto “Adicción al videojuego en jóvenes”, como parte de los estudios de bienestar que realiza el Observatorio de Calidad de Vida y Salud Social (OCVS), adscrito al IIP.
Al respecto, señalaron que se desarrolla en vinculación con la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones y el Instituto Nacional de Salud Pública, con el propósito de incrementar la atención hacia la prevención, diagnóstico y tratamiento del trastorno por uso de videojuegos, que, de acuerdo con las conductas adictivas en la Clasificación Internacional de Enfermedades-11, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo considera ya como un trastorno.
El investigador dijo que recientemente se desarrolló un estudio con la participación de alumnos de bachillerato del Instituto Politécnico Nacional (IPN), a fin de validar el instrumento que permita identificar la sintomatología del trastorno por uso del videojuego, y conocer las características de sus estilos de vida, los estados emocionales como la ansiedad y depresión, que en conjunto inciden en el bienestar y salud mental de los jóvenes.
Precisó que en el estado de Veracruz se han realizado también estudios en población de nivel primaria, secundaria, bachillerato y universidad; en éstos, se encontró que las niñas de primaria registran mayor porcentaje que los varones en síntomas relacionados con la conducta adictiva a los videojuegos.
Por su parte, Arellanez Hernández detalló que, si bien los videojuegos desarrollan determinadas habilidades en los jóvenes, también es importante alertar que jugar más de 20 horas a la semana representa ya un riesgo para caer en la adicción y los lleva en muchos casos a evadir la realidad; por lo tanto, recomendó que padres de familia vigilen que sus hijos no jueguen más de 15 minutos al día.
En tanto, Enrique Romero dijo que encabeza un equipo multidisciplinario que desarrolló un videojuego para promover hábitos saludables; no tiene fines comerciales, sino de estudio e investigación.
