* Para el metapneumovirus humano
Por Noemí Valdez
Reportera de NOTIVER
Aunque el metapneumovirus humano (HMPV) ha comenzado a preocupar a las autoridades sanitarias en varias partes del mundo debido a su reciente incremento, actualmente no existe una vacuna, ni un tratamiento antiviral específico para combatirlo.
La Secretaría de Salud a nivel federal reiteró que este virus, que afecta principalmente las vías respiratorias, circula con mayor frecuencia durante los meses de invierno, “y su actividad tiende a aumentar hacia el final de esta temporada y al inicio de la primavera”.
Actualmente, el tratamiento del metapneumovirus se centra en aliviar los síntomas, ya que no existen medicamentos antivirales para combatirlo.
En la mayoría de los casos, el paciente puede mantenerse en casa y recibir atención en forma de descanso, líquidos y medicamentos para reducir la fiebre.
Sin embargo, si los síntomas empeoran, es importante acudir a un hospital para recibir tratamiento más especializado, como oxígeno adicional o líquidos intravenosos.
El HMPV es conocido por causar síntomas similares a los de un resfriado común, como tos, fiebre, dolor de garganta y dificultad para respirar.
En los casos graves, los médicos pueden recurrir al uso de corticosteroides para reducir la inflamación y aliviar las dificultades respiratorias.
“La clave para prevenir complicaciones graves es la detección temprana y la intervención médica oportuna. Además, las medidas preventivas, como cubrirse la boca al toser, lavar las manos con frecuencia y evitar el contacto cercano con otras personas, son esenciales para evitar la propagación del virus” alertó la dependencia federal.
Tambien apuntó que aunque los antibióticos no tienen efecto sobre el HMPV, los médicos pueden recetar medicamentos antibacterianos si se detecta una infección bacteriana secundaria, que puede complicar el cuadro clínico del paciente.
“Es fundamental seguir las recomendaciones de los especialistas y, en caso de síntomas graves, buscar atención médica de inmediato”.
El HMPV se transmite principalmente a través de gotas respiratorias al toser o estornudar.
Las personas infectadas pueden experimentar síntomas similares a los de una gripe o resfriado, pero en algunos casos, sobre todo en niños pequeños, personas mayores o individuos con enfermedades preexistentes, la infección puede complicarse y requerir atención médica.
