* Entre comuneros y comerciantes
Por Rodrigo Barranco Déctor/NOTIVER
Ejidatarios de Salto de Eyipantla, en el municipio de San Andrés Tuxtla, destruyeron las escaleras que descienden de la cascada al río, debido a un conflicto que tienen con comerciantes de las zonas bajas de esos predios.
La situación es crítica para el desarrollo económico de la región debido a que lo hacen justo en Semana Santa, cuando todos esperaban el arribo de turistas.
Todo inició, según testigos, cuando ambas partes entraron en conflicto hace más de 25 años, debido a que los comuneros estaban descontentos porque el gobierno federal entregó concesiones a dos familias para la vendía en el área baja de la cascada.
Para evitar confrontaciones, las autoridades dividieron a los grupos dejando a los ejidatarios en la planta alta, donde está el mirador y a los vendedores, junto al río.
Sin embargo, durante décadas han estado en descontento hasta que todo estalló la noche de ayer lunes, cuando los comerciantes decidieron empezar a cobrar 30 pesos de entrada a los turistas y no cinco pesos, como estaba acordado desde hace años.
Durante todo el día, el ayuntamiento trató de mediar, pero no logró nada, por lo que unas cien personas del ejido tomaron por asalto la parte baja y tumbaron la rampa que permitía a los visitantes bajar de la cascada.
De esa forma, también dejaron incomunicadas a las personas que venden en ese sector, por lo que tuvieron que irse a sus casas entre la maleza, por lo que se espera que este martes siga la disputa de ese atractivo turístico.