* Dionisio Pérez Jácome
* Coatepecano
* Funcionario, político
* La Tigresa le tenía rabia…
Por Noemí Valdez
Reportera de NOTIVER
Este martes a la edad de 88 años falleció, Dionisio Pérez Jácome, conocido como “Nicho” quien fuera funcionario y político.
Entre sus multiples cargos fue titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal; de la Compañía Nacional de Subsistencias Populares (CONASUPO), la entonces Secretaría del Patrimonio Nacional y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
En 1986 al asumir el cargo de gobernador de Veracruz Fernando Gutiérrez Barrios, lo nombró representante del gobierno veracruzano en el Distrito Federal, ocupando el cargo hasta 1988.
Posteriormente fue diputado federal en dos ocasiones; fungió también como procurador federal agrario en 1996 y coordinador general de Comunicación Social del gobierno federal de 1996 a 1997.
Despues fue senador y Subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación.
Sus hijas, Lorena Pérez-Jácome y Gloria Pérez-Jácome, son comunicadores y su hijo, Dionisio Pérez-Jácome Friscione, fue secretario de Comunicaciones y Transportes de 2011 a 2012 en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa.
En redes sociales, politicos e intelectuales lamentaron la muerte del priista; la diputada federal Lorena Piñón posteó.
“Se extingue un político ejemplar que hizo escuela por su sobresaliente trayectoria: extraordinario parlamentario, servidor público destacado y un constructor de acuerdos e instituciones. Despedimos a Dionisio Eduardo Pérez Jácome, un auténtico Hombre de Estado, en paz descanse”
El diputado local Héctor Yunes Landa lo describió como uno de los veracruzanos más influyentes y con una de las mejores trayectorias en la administración pública “al que solo le faltó ser gobernador del Estado”.
En el año 2000, Irma Serrano “La Tigresa” era senadora y fue entrevistada por el periodista Joaquin López Dóriga quien la cuestionó por los insultos que ésta le dijo en una sesión de la Cámara de Senadores al veracruzano, a lo que la actriz contestó.
"Mire, tanto coraje me hizo usted pasar que ya se me fue la voz, no tengo más que dos alternativas: o despedirme de esta honorable Cámara de Senadores madreándomelo..."
