YEYA

*“No hay subordinación al Gobernador”

*“Está auditando todas las áreas”
Por Noemí Valdez
Reportera de NOTIVER

Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, Magistrada Presidenta del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura, mejor conocida como “Yeya” cumplió un año en el cargo, donde señaló que no ha sido meses fáciles pues desde que llegó, enfocó su trabajo en tres ejes: combate a la corrupción, profesionalización y la capacitación.

Apasionada de la lectura de superación personal y de la obra de Gabriel García Márquez, la Magistrada Presidenta, se define como una persona idealista, que busca dejar mejores condiciones laborales para las mujeres que laboran en esa institución.

Nacida en el Puerto de Veracruz donde vivió su niñez, piensa en que se puede dejar un mejor futuro a las nuevas generaciones.

¿Magistrada ha sido fácil?
Ha sido fácil cuando haces lo que te gusta, yo estoy muy apasionada de mi trabajo, tengo muchos años en la institución, la quiero.

Por supuesto, ha habido situaciones complejas por ciertas circunstancias, pero hemos ido avanzando.

Una de ellas fue lo de los climas que nos pasó en Veracruz, un edificio de cristal que es una lupa, ahorita ya está en curso la licitación que se va a concretar este mes y en enero estemos estrenando climas.

¿Si se pudiera definir, quien es usted?
Soy una persona que tiene muy firmes sus convicciones, creo sin duda en la justicia.

Creo en las personas. Nací aquí en el Puerto de Veracruz un 3 de abril de 1973, tengo 50 años, estudie en la UV en Xalapa, en Derecho.

Viví en Veracruz por la escuela Náutica Naval, yo caminaba con mi papá a la panadería Colón, íbamos por paletas al Malecón y luego, a la Parroquia Antigua, para mí el Puerto es un lugar significativo.

¿Siempre se separa al Presidente del Poder Judicial del quehacer político, usted así lo ve?
Yo creo que no se puede separar porque la administración de justicia está encaminada a la sociedad, a los ciudadanos, ellos por supuesto que están inmersos en temas políticos, pero que quede muy claro, la administración de justicia la actividad toral del Poder Judicial.

Yo no tengo ningún interés político, pero soy titular de un poder que está vinculado al Ejecutivo y Legislativo y los tres constituimos el Gobierno.


Hay una polémica por la división de poderes, ¿cómo trabajar sin caer en la confrontación, pero tampoco en la complacencia con el titular del Ejecutivo? Porque se ha dicho que se persigue a opositores políticos.

Hay que dejar en claro que debe haber coordinación. Un tema es la coordinación y otro, estar supeditado o a las órdenes.

Quiero dejar en claro que, si estuviéramos supeditados, todo sería vinculaciones a proceso, serían sentencias condenatorias, serían ordenes de aprehensión, pero eso no sucede…

¿Qué retos siguen?
Me interesa seguir con el combate a la corrupción. Seguir con la capacitación, seguir con la unidad de género porque tenemos alertas.

Soy una persona de retos, ideales y creo que podemos contribuir a mejorar la sociedad. Soy mamá, tengo un hijo de 20 años y quiero dejarle un estado en paz.

En breve concluye la auditoría interna y de acuerdo a los resultados se pueden hacer los cambios pertinentes.

Ser mujer y ocupar ese alto cargo, ¿ha sido fácil?
No, a mí me tocó cuando llegué era una institución dominada por hombres en 1997, solo había dos Magistradas.

Claro que ha sido complicado, no estamos exentos de temas como acoso, y hubo un Magistrado que decía que no quería mujeres porque se embarazan, tienen hijos y dejan el trabajo.

Fue complicado, nos hemos enfrentado a eso. Implica mucho esfuerzo, pero tenemos un fuerte compromiso de dejar mejores condiciones de igualdad.

Nada ha sido regalado, la gran mayoría de las mujeres del Poder Judicial tienen licenciatura, maestría y doctorados son mujeres preparadas.