VIVIENDO CON SENTIDO | ¿CÓMO DEJAR DE REPETIR LA HISTORIA FAMILIAR? - Las lealtades invisibles mantienen a una persona en su sistema familiar, repitiendo la misma historia, generación tras generación. Algunas personas se preguntan cómo resuelven...

DAVID MANUEL MARTÍNEZ PÉREZ
PSICOTERAPEUTA CLÍNICO
Certificado en Hellinger Sciencia

¿CÓMO DEJAR DE REPETIR LA HISTORIA FAMILIAR?

“PERCIBIENDO EL OTRO LADO DE LA REALIDAD”

Estamos atrapados en el destino de las personas que, en nuestra familia, están perdidas porque fueron olvidadas o excluidas.

Bert Hellinger

Las lealtades invisibles mantienen a una persona en su sistema familiar, repitiendo la misma historia, generación tras generación. Algunas personas se preguntan cómo resuelven esta situación en sus vidas.

¿Cómo no termino solo como las otras mujeres de mi familia?

¿Cómo evitar divorciarse, cómo escapar de las enfermedades familiares?

¿Cómo escapar de la historia familiar? ¿Cómo dejas de repetir la historia familiar?

Hay en cada ser humano “buena conciencia”, es la que hace que cada miembro de la familia gane el mérito de pertenecer a la familia, perpetuando el papel que desempeñó en la familia (abandono, soledad, divorcio, desamor, etc).

Esto lo hace una persona porque sigue el “amor ciego”, aquel que en su inocencia infantil cree que para ser un buen miembro de su familia, uno debe seguir el mismo destino que sus predecesores. La mayoría de la gente está arraigada en este tipo de amor.

Por otro lado, nos encontramos con la “mala conciencia”, es la que hace que una persona trascienda los límites de su conciencia familiar al atreverse a hacerlo de manera diferente a los demás y es el producto de un profundo proceso de “individualidad”, que a veces requiere un camino de soledad, pero de comunión con una mayor conciencia que es el producto del “amor iluminado”.

A continuación, pequeños pasos que se pueden dar para conectar con ese Amor Iluminado que nos ayuda a reconocer nuestras propias alas y a emprender vuelo hacia nuestro ser.

Deja de estar en contra de tu sistema familiar: cuando criticas o juzgas a tu familia te estás condenando a repetir tu propia historia.

Acepta a todos como son: la consciencia te da paz de amor, cuando aceptas abres la puerta a la transformación.

Honra a tus antepasados: aquellos que vivieron antes de ti hicieron todo lo posible, para darte vida.

Agradece a cada miembro de tu sistema todos los días: no tienes que correr a ellos para darles un abrazo, las sinceras gracias aparecen cuando les das un lugar en tu corazón y la reverencia del alma.

Camina hacia la vida humildemente: vive alegremente, entrégate en sus manos, acepta tu destino con amor y coraje.
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INSOMNIO

Desconozco cuántos compartimos esta condición por el desvelo, por el maldito insomnio y la incitadora soledad que nos acecha desde que amanece.

Callan los de afuera, susurran nuestros demonios dentro.

Nos despojamos del maquillaje social y nos mostramos tal cual somos en nuestro más pulido espejo: la conciencia.

En lo personal, me da por ponerme sentimental, ya saben, cosas que suelo romantizar: la vida, el amor, la utopía.

He dejado las formas para la vigilia, cosas que la mayoría de la gente suele parlotear; me es indiferente a estas horas.

Hoy persigo el fondo en otros sueños. Me aferro a mi lucidez que sé que algún día perderé; así como a cada una de mis facultades que atesoro como nunca, porque nadie goza tanto como aquel que sabe que no tendrá más.

Por años, mi peor lastre fue pensar que mañana uno amanece, pero la vida tiene sus peculiares formas de decirte a través de otros, que ineludiblemente a todos nos llegará el día y la hora; que llegamos al mundo medidos en todo aspecto, que la vida tiene sentido precisamente en la oportunidad única que se nos brinda para experimentarla.

Porque si tuviera yo la eternidad para posponer todo, entonces, ¿para qué coños quiero este momento?

Si no es único, no tiene valor.

¡La vida tiene caducidad!

Verdad tan obvia y tan olvidada.

Pero estas letras más allá de ser una reflexión más, son un destello de conciencia.

Conciencia de saber que todo han sido decisiones, ¡Mías y de nadie más!

Me reservo la culpa para otra ocasión.

Amar es una decisión; dejar de amar también.

Ser feliz es una decisión; dejar de serlo también.

Vivir intensamente es una decisión; no hacerlo también.

Todo es consecuencia de elecciones que vamos tomando, incluso aquellas que hacemos inconscientemente.

Porque aquello que no cambias, lo estás eligiendo.

Conforme pasan las horas, ya dejo de pensar mis sentimientos y comienzo a sentir mis pensamientos.

¡Qué milagro tan sublime éste de la existencia!

No pedí estar aquí, ¡creo que nadie! Pero créemelo, tampoco sé a ciencia cierta a quién agradecerle este regalo celestial.

¡Me fascina cuando una lagrima rueda por mi mejilla, mientras ésta se contrae para sonreír!
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TÓXICA...

Una persona tóxica es aquella que destruye tu ser.

Son personas que disfrutan reduciendo tu autoestima, tu dignidad y que te envenenan.

Las personas tóxicas son negativas y envidiosas, les gusta que fracasen los demás, sus inseguridades y sentimientos de inferioridad las inducen a sabotear los esfuerzos de otras personas por ser felices.

Una persona se vuelve tóxica como resultado, tanto de su herencia genética, como de las circunstancias de su vida, o de una mezcla de ambas.

Lo malo de la gente tóxica es que logran sacar lo peor que los demás tenemos dentro.

Así que no sólo nos causan problemas, sino que logran que nosotros mismos actuemos en nuestra contra.

La gente tóxica suele ser: controladora, cruel, egoísta, envidiosa, “sabe-lo-todo”, sarcástica, “dos caras”, deshonesta, oportunista, mentirosa, indiscreta, entrometida y negativa elimínala de tu vida, aléjalas de ti y enfócate en rodearte de gente positiva que te impulse.

Toda la gente que logra el éxito y la felicidad verdadera, lo alcanza con el apoyo y la ayuda de personas saludables y tú también debes ser saludable, funcional.

Una persona saludable es aquella que te comparte bienestar, que te permite ejercitar tus talentos y habilidades, con respeto a tu persona, tu integridad y tu dignidad y que está dispuesta a “realizar un esfuerzo adicional” por ti y por los demás.

Empieza por analizar a tu alrededor aleja a los vampiros de tu energía.