Por MARIO LARA
Reportero de NOTIVER

De milagro se salvó de morir un repartidor en bicicleta, luego que en estado de ebriedad chocó contra las llantas traseras de un tráiler con remolque, y hasta rebotó frente a la iglesia de San Antonio, perteneciente al municipio de Jalapilla.

El percance sucedió aproximadamente a las 15:50 horas de ayer, cuando el ahora lesionado de 45 a 50 años, y de complexión delgada, viajaba en su unidad de padales, tipo montaña, rodada 26, color negro, que desplazaba por la prolongación de la avenida Sur 13.

Iba con dirección a la cabecera municipal de Jalapilla, procedente de Orizaba, cuando tomó demasiado rápido la curva a la altura de la calle Oriente 26, y trató de rebasar sin precaución a un camión Isuzu, color blanco con caja, que hacía maniobras para estacionarse.

El repartidor en bicicleta invadió por poco el carril de circulación contraria, impactando de frente contra las llantas del eje trasero de un remolque tipo caja metálica, que jalaba un tracto-camión blanco, que pasaba en esos instantes.

Una cámara de seguridad captó el momento del accidente, en el cual estuvo a punto de morir atropellado el ciclista, pero después de chocar contra los neumáticos, salió proyectado de su asiento y voló a tres metros sobre la carpeta de rodamiento.

El tráiler aplastó las llantas de su bicicleta, continuando su trayectoria con rumbo a Orizaba, mientras el trabajador se levantó adolorido y desorientado, tanto por los golpes que había sufrido, como por los efectos de las bebidas embriagantes que había consumido.

Testigos llamaron al número de emergencias, solicitando la presencia de socorristas para valorar su condición, pero afortunadamente no presentó heridas graves, sólo contusiones menores y un enorme susto.