VARIOS SUFREN DE MALTRATO ANIMAL

*Los animales presentan lesiones, desnutrición o están muy enfermos

Por Eduardo Guevara
Fotoreportero de NOTIVER

Medellín de Bravo se ha visto envuelto en un caso de presunto maltrato animal que involucra a tres caballos que vivían en condiciones precarias.

Todo comenzó el viernes pasado, cuando una yegua llamada “Mily” cayó en un aljibe sin tapa, lo que generó una intervención por parte de las autoridades municipales.

El propietario de los animales no pudo acreditar la propiedad de los mismos, lo que llevó a las autoridades a tomar una medida drástica: retirarle a las dos yeguas y al potro bajo su cuidado, alegando que no se encontraban en un entorno adecuado para su bienestar.

Mily, la yegua accidentada, no sólo sufrió lesiones por la caída, sino que también presentaba un golpe en la cabeza que parecía ser antiguo, indicando un posible historial de maltrato.

Lasana, la otra yegua, mostraba daños visibles en sus cascos y laceraciones en distintas partes de su cuerpo.

Ambas yeguas padecían desnutrición, al punto que las costillas de una eran visibles y su piel no recuperaba su forma al ser estirada, señal de mala alimentación.

El potro, por su parte, estaba en mejores condiciones, ubicándose en un nivel medio de la escala de bienestar equino, aunque no exento de riesgos.

Los caballos habían sido vistos atados a un árbol en un patio del fraccionamiento Puente Moreno, y liberados en un terreno cercano sin supervisión adecuada.

La falta de un lugar seguro para su desarrollo, sumado a la ausencia de marcas de registro que acreditaran su propiedad, complicó aún más la situación.

El supuesto dueño presentó una constancia de compra-venta de una yegua de dos años, emitida por la agente municipal de Paso del Toro, pero esto no fue suficiente para que las autoridades le devolvieran los animales.

Además, los caballos pastaban en una propiedad privada sin permiso, exponiéndose a más peligros por la falta de bebederos y áreas seguras.

Los tres caballos permanecen bajo el resguardo del municipio, a la espera de que el presunto propietario demuestre la titularidad y garantice un ambiente adecuado para su desarrollo.